Oh I'm just counting

Ultra derechista Jair Bolsonaro enfrenta críticas por cifra récord de incendios en la Amazonia

El lunes, a las 15.00, Sao Paulo se oscureció. De repente. Pese a estar a más de 3.000 kilómetros de la Amazonia, la megalópolis sintió los efectos de los incendios que, desde hace días, se extienden por las áreas selváticas y que se han propagado por los estados de Acre, Rondônia, Mato Grosso y Mato Grosso del Sur. El pasado 10 de agosto los hacendados del estado de Pará organizaron el

“Día del Fuego”, en el que quemaron áreas para pastos y en proceso de deforestación. Según uno de los líderes, entrevistado por el periódico de la ciudad amazónica Novo Progresso, los terratenientes se sienten “amparados por las palabras de Jair Bolsonaro”. También afirmaron que deseaban mostrar al Presidente de Brasil “que quieren trabajar”.

“Todo indica que lo consiguieron”, comentó la escritora brasileña Eliane Brum en una columna publicada en el diario El País. Según los datos del Instituto Nacional de Investigación Espacial del Brasil (INPE), en esa fecha los incendios aumentaron un 300% en Novo Progresso, con 124 focos. Al día siguiente, el número subió a 203.

Y la situación no ha hecho más que repetirse en todo Brasil. Según datos del Programa de Quemas del INPE, que contabiliza los incendios con la ayuda de imágenes satelitales, este año ha habido una cantidad récord de incendios forestales en el país, 74.155 hasta el martes. Eso es un incremento de 84% en comparación al mismo período del año pasado. Además, es el número más alto de focos de enero a agosto en siete años, apuntó el portal G1 de Globo.

De acuerdo con el INPE, durante la última semana, los focos de incendio han afectado 68 zonas protegidas o reservas indígenas de la región amazónica. De hecho, el Amazonas concentra el 52,5% de los brotes de quemas en 2019.

Esos focos se intensificaron en un marco de avance rápido de la deforestación en la región amazónica. Así lo indica un informe del Instituto del Hombre y el Medio Ambiente de la Amazonia (Imazon), que desde hace 28 años estudia la región. Según esta institución, la tasa de deforestación en la selva brasileña creció un 66% en julio, aunque ese porcentaje llega al 278%, según las proyecciones del INPE.

En la misma línea, el Instituto de Pesquisa Ambiental de la Amazonia (Ipam) asoció el crecimiento de los focos de fuego a la deforestación promovida por los hacendados. “Si la sequía no explica los actuales incendios, la retomada de la deforestación de la selva sí lo hace. El fuego es normalmente usado (por colonos y hacendados) para limpiar el terreno después de la deforestación”, denunció la ONG.

De hecho, el aumento de la tala de árboles en el pulmón verde del planeta ha llevado a Noruega y Alemania a suspender partidas destinadas al Fondo Amazonia, dedicado a la protección ambiental en Brasil y del que ambos países son los principales patrocinadores. “El bloque amazónico lamenta que las posiciones del gobierno brasileño hayan provocado la suspensión de recursos” del Fondo, expresaron los gobernadores de los nueve estados amazónicos.

Tras los recortes y las críticas recibidas, Bolsonaro insistió en defender la “soberanía” de Brasil sobre la Amazonia, mandó a la canciller Angela Merkel a usar los fondos para “reforestar Alemania” y reprochó a Noruega por “matar ballenas” y “extraer petróleo del Polo Norte”.

Y lejos de distanciarse de estas declaraciones, Bolsonaro insinuó hoy -sin citar ninguna evidencia- que las ONG podrían haber provocado los incendios que afectan a la Amazonia para “llamar la atención” contra su gobierno por haberles suspendido recursos. El discurso del Presidente fue clasificado como “irresponsable” y “ligero” por los ambientalistas. Bolsonaro también acusó a algunos gobernadores de la región de ser “conniventes” con los incendios. “Transferir responsabilidades no va a acabar con las quemas”, le respondió Waldez Goes, gobernador do Amapá.

El Ministro de Medio Ambiente de Brasil, Ricardo Salles, se convirtió hoy en blanco de las críticas por la postura de Bolsonaro. El funcionario fue recibido con abucheos y al grito de la “Amazonia se quema” durante el plenario de apertura de la Semana del Clima de Latinoamérica y Caribe que se celebra hasta este viernes en la ciudad de Salvador.

Antes de su intervención, que duró apenas cinco minutos, Salles se refirió a los incendios desatados en la Amazonía. “Es una situación muy preocupante, agravada por el tiempo seco, el calor.

Vamos a actuar para apoyar a los gobiernos de los estados en ese combate de los incendios”, aseguró. No obstante, reconoció que ha habido recortes en los presupuestos destinados a la fiscalización y lo atribuyó a la crisis económica que afecta a las diversas regiones de país y al propio Estado federal.