La espada que perteneció al teniente Armando Cortínez, el primer aviador que cruzó ida y vuelta la Cordillera de Los Andes en 1919, y que fue sustraída desde el Museo de Aeronáutica, fue encontrada.
El hecho en cuestión ocurrió el pasado 15 de febrero frente a las cámaras de seguridad del lugar, las cuales registraron cómo un hombre llegaba tranquilamente al recinto y se guardaba la pieza histórica entre su ropa. 12 Días transcurrieron sin que se lograra encontrar la espada.
Gracias a la evidencia, la Brigada de Delitos Contra el Medioambiente (Bidema) de la PDI identificó a un hombre en situación de calle como el presunto responsable, quien negó los hechos. El sospechoso fue formalizado, ordenándose la medida cautelar de firma mensual y arraigo.
Sin embargo, de la espada aún no habían rastros. Según informó la Fiscalía Metropolitana Occidente, a eso de las 16:30 horas personal de la subcomisaria de Carabineros de Cerrillos recibió una llamada telefónica por parte del párroco Juan Tapia, de la parroquia San Juan de Dios, ubicada en la intersección de Buzeta y Avenida 3. El religioso señaló haber encontrado en el patio del lugar un objeto con características similares a la espada sustraída, lo cual fue más tarde confirmado por los efectivos, quienes constataron que la pieza estaba envainada en un tubo de PVC naranjo y su empuñadura envuelta en papel de diario.