Los problemas que están sufriendo las araucarias en el sur del país podrían tener relación con los efectos del cambio climático en el mundo. Al menos así lo postula un grupo de expertos que lleva un año trabajando en la zona para entender la situación que viven estos árboles.
El trabajo, a cargo de científicos de la Universidad de Concepción y la Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones (CMPC), ha analizado cerca de 50 hongos y bacterias de manera aislada que se han encontrado en muestras de raíces y ramas en la Cordillera de Nahuelbuta, en la Región del Biobío.
Entre las hipótesis que han planteado los expertos sobre la muerte de ejemplares adultos y jóvenes de las araucarias, se destaca un posible "estrés ambiental" que predispone a estas coníferas a la acción de agentes que antes eran inocuos, pero que -producto del cambio climático- ahora podrían ser letales.
De las 2.460 hectáreas con presencia de araucarias en el sector de Trongol Alto, cerca del 70% de estos árboles se encuentra con casos de muerte de ramas, con diversos grados de severidad, según alertan los científicos.
"La mayor probabilidad es que estos árboles hayan sufrido algún tipo de estrés fisiológico y eso permite que el ataque de cualquier agente patógeno sea mucho más severo", explicó Eugenio Sanfuentes, investigador de la Universidad de Concepción, agregando que este patógeno probablemente fue introducido en la zona hace muchos años, "pero llama la atención que un organismo que habita en el suelo se encuentre en zonas altas con bosque nativo, como la Cordillera de Nahuelbuta".
No obstante, los expertos estiman que factores abióticos (no causados por seres vivos), como el déficit de precipitaciones, la falta de nieve y variaciones de temperaturas en meses invernales y estivales, hacen a estas coníferas vulnerables a la acción de este u otros hongos y bacterias. Según datos de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), el daño foliar afecta al 93% de las 320 mil hectáreas de araucarias que existen en Chile, de las que, hasta ahora, el 1% ha muerto.