Este jueves se realizó la exhumación de tres cuerpos pertenecientes a víctimas de la Caravana de la Muerte en La Serena en 1973, tras el golpe de Estado.
Cabe recordar que el reportaje de CNN "La melodía inconclusa" entrega detalles de las fallas del Servicio Médico Legal (SML) en la identificación de los restos de personas desaparecidas durante la dictadura en La Serena.
Se trató de tres víctimas, de las 15 en total que dejaron ese paso de la caravana: Roberto Guzmán, abogado de 25 años; Mario Ramírez, profesor universitario de 44 años; y Jorge Jordán , médico de 29 años. Todos ellos fueron víctimas del paso de ejecuciones sumarias realizadas bajo el mando del general Sergio Arellano Stark.
En ese contexto, el ministro Sergio Troncoso autorizó estas diligencias para verificar si la identidad de estas personas es correcta, ya que un grupo de exmilitares confesó, con el objetivo de obtener beneficios dentro de la investigación de la desaparición, que uno de los presos que Estaba en la cárcel de La Serena, Francisco Santoni , había sido enterrado ilegalmente en otro cementerio y no en el lugar donde se creía. Al igual que las 15 víctimas de la caravana y otras tres víctimas de la dictadura en la zona, Santoni fue identificado en 1998 en la fosa del Cementerio Municipal de La Serena.
Las dudas comenzaron cuando el ministro Vicente Hormazábal ordenó exhumar el cuerpo de Santoni y se descubrió que no correspondía. Así comenzó un efecto dominó en torno a la identificación de estas 18 víctimas. Hasta el momento, se han exhumado dos víctimas y se confirmó que sus identidades no eran correctas.
De hecho, algunos de los cuerpos contienen restos óseos de hasta cuatro personas distintas. Por ello, se han enviado muestras al extranjero, a la Universidad de Innsbruck , para verificar a quién pertenecen estos restos recogidos en la fosa de La Serena en 1998 y que no habían sido identificados. Estos restos forman parte de los que ya están en el Servicio Médico Legal sin identificar.
Este proceso de identificación también incluye las cajas de la Universidad de Chile, que fueron entregadas en custodia cuando el ministro Juan Guzmán estaba a cargo del caso. Estas cajas contienen restos óseos de detenidos desaparecidos que aún no han sido identificados. Esta pericia se realiza específicamente con las víctimas que ya habían sido identificadas, pero donde se detectó un error. Por eso, ahora se están exhumando los restos de estos tres cuerpos para someterlos a análisis y confirmar si corresponden a las identidades verdaderas.
El proceso de exhumación y análisis de estos tres cuerpos busca confirmar o descartar las identidades. Aunque este es un proceso largo, será más ágil en esta ocasión, ya que el SML se ha comprometido a realizar las pericias en sus propios laboratorios.
Recordemos que, después del escándalo del Patio 29 en 2003, donde hubo errores en la identificación, se decidió enviar todas las muestras relacionadas con derechos humanos al extranjero, lo que resultó en demoras significativas. Hoy, el SML ha asegurado que tiene las capacidades para realizar los análisis de manera interna.