Tiene solo 24 años y se convirtió en el alcalde más joven de Chile. Es Cristóbal Zúñiga, el concejal del Partido Comunista que ayer ganó las elecciones para asumir como jefe comunal subrogante en la convulsionada comuna de Tierra Amarilla.

 

El edil reemplaza en el cargo a Mario Morales, quien hace un mes fue detenido junto a otros siete funcionarios por el delito de fraude. En la votación de ayer, Zúñiga fue el primero en votar. Lo hizo por él mismo y realizó un un análisis de la realidad que aqueja a la comuna, pasando por temas relativos a los problemas judiciales que enfrenta el municipio, además de deficiencias en áreas como educación, vivienda y trabajo. Luego, los otros miembros del Concejo también le dieron su apoyo al joven del Partido Comunista. De acuerdo al Diario Atacama, tras ser el elegido, manifestó que realizaría un levantamiento de información respecto a la condición en la cual está el municipio.

 

"Les agradezco a cada uno de mis colegas concejales la oportunidad de poder tomar las riendas de este municipio que se encuentra en muy complejas situaciones, demostrar que las cosas se pueden hacer bien y de la forma correcta que nosotros la juventud tenemos todas las ganas de afrontar el desafío". Además, y en relación a la auditoría que señaló se hará en el municipio señaló que "en vista que estoy en desconocimiento del actual funcionamiento interno de la municipalidad por la antigua administración y todo el mes que llevamos siendo solo concejales, necesito interiorizarme sobre la disponibilidad de los recursos de la municipalidad.

 

Para realizarla, en vista de la situación que está pasando Tierra Amarilla, se le puede solicitar (recursos) al gobierno central, regional o también a través de algún aporte de la empresa privada. Esto tiene que ser en beneficio de la comuna y también para sanear al municipio y que tenga un correcto funcionamiento". Respecto a las negociaciones para llegar a una votación unánime, Cristóbal Zúñiga explicó que el tema "fue zanjado ayer, entre todos fue el compromiso de mantener la postura que tuve como concejal tanto en mi rol en la municipalidad como en la cercanía con ellos, en la confianza que se ha generado. Cualquier problema que ellos tengan vamos a darle una solución como si fuésemos los 4 los actuales alcaldes, obviamente asumiendo yo la tremenda responsabilidad administrativa que esto conlleva. Todo voto se cerró de mano, de abrazo y en el nombre de Dios".