El cuerpo de María Inés Contreras, la chilena que murió luego de sufrir un accidente mientras estaba de vacaciones en Cancún, México, será repatriado de forma particular en medio de las críticas de la familia, que acusó falta de ayuda del Gobierno chileno a través del Consulado.
Frente a esto, la ministra (s) de Relaciones Exteriores, Carolina Valdivia, indicó que el pasado 8 de mayo realizaron el primer contacto con la familia, que les prestaron toda la ayuda que tenían disponible y que el 21 de mayo se hizo la solicitud para traerla a Chile en un avión ambulancia.
Valdivia, en una fría y burocrática presencia ante los medios, dijo que ofrecieron ayuda para repatriar el cuerpo.
La enfática respuesta de la familia
Fabián Valderrama, uno de los hijos de María Inés, insistió en la posición de la familia: todos los gastos de repatriación los harán de forma personal y que no aceptarán el apoyo del Gobierno, descartando que Cancillería se haga cargo de los gastos.
"Con respecto a cómo lo vamos a hacer para el tema de repatriación de mi madre,ese rumor que lanzó Cancillería de que se van a involucrar es falso. Estamos haciendo esto de manera particular, tanto el repatriado como el retorno a Chile es netamente particular o familiar", enfatizó.
Valderrama sostuvo que "el Gobierno no reaccionó a tiempo, lamentablemente mi madre fue víctima de la inoperancia de varias personas del Gobierno y ahí tenemos el resultado".
"Como familia estamos devastados, pero queremos que esto marque un precedente. Mi madre salió de vacaciones a cumplir su sueño y ahora resulta que la estamos devolviendo en un cajón", expresó.