El fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, llegó esta mañana hasta el Arzobispado de Santiago para desarrollar una serie de diligencias en el marco de la investigación por presuntos abusos sexuales de sacerdotes de la diócesis de Rancagua.
En la zona operaba, de acuerdo a denuncias de víctimas, un grupo de religiosos agrupados en una cofradía que se hacía llamar "La Familia".
Breve, pero enfático, el persecutor señaló que "en Chile todos estamos sometidos a la justicia ordinaria, todos, todas las personas".
"Cuando culminen las diligencias vamos a hablar. Ahora voy al arzobispado", añadió ante la constantes preguntas de la prensa, debido a que en Rancagua también hubo trabajo policial por el caso dado a conocer por T13 en mayo pasado.
Tras el trabajo, desarrollado junto a carabineros del OS-9, Arias explicó que "se trata de delitos sexuales cometidos contra menores de edad. En este caso, es importante destacar que aquí existe acción penal pública. Esto es, yo no necesito una denuncia de la persona, como podría ser un delito sexual contra un mayor de edad".
"El objeto de estas diligencias es pesquisar delitos contra menores de edad que en este caso aún no estén prescritos, añadió.