A un año del inicio del Plan de Seguridad y Combate Contra el Crimen Organizado en Unidades Penales, Gendarmería y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos presentaron el balance del último allanamiento masivo realizado de manera simultánea en 67 cárceles.
Cerca de la mitad de la población privada de libertad en nuestro país fue intervenida el pasado lunes y martes -lo que requirió una fuerza operativa de casi 5 mil funcionarias y funcionarios de Gendarmería-, conducidos por el departamento de Seguridad Penitenciaria, cuyo objetivo fue confiscar elementos prohibidos de las manos de las y los reclusos.
De esta forma, se lograron incautar 2.174 unidades de armas blancas, 1.193 unidades de celulares y más de 2 kilos de sustancias ilícitas. Cabe destacar que este operativo, según las autoridades, es el más grande de la historia institucional.
El director nacional de Gendarmería, Sebastián Urra Palma, expresó sus agradecimientos a las y los funcionarios que participaron de este operativo y valoró los buenos resultados obtenidos a raíz de la implementación de esta medida de seguridad, la cual ha logrado retirar gran cantidad de elementos de los establecimientos penales.
Según la autoridad, esto “indica que acentuar este tipo de procedimientos por parte de Gendarmería hace que las unidades se mantengan tranquilas, dando más seguridad tanto al personal como a los privados de libertad”.
En la misma línea, el subsecretario de Justicia, Jaime Gajardo Falcón, recalcó que continuar con estos operativos es clave para mantener la seguridad en los recintos penales. Además,”nos permite tener establecimientos que puedan generar las condiciones para la reinserción social, y para eso se requiere un trabajo constante y permanente”.
“Por lo mismo, estos operativos son fundamentales junto con otras medidas, como aumentar la tecnología de los establecimientos para tener mayor control de ingreso”, expresó.
En tanto, es importante considerar que este es el operativo número ocho realizado durante el 2023, pero es el número decimoséptimo desde que se dio inicio al Plan de Seguridad y Combate Contra el Crimen Organizado en Unidades Penales.
Solo entre 2022 y 2023 los allanamientos nacionales retiraron un total de 10.929 armas blancas, 5.937 teléfonos celulares, 3.034 litros de licor artesanal, y 27 kilos de sustancias ilícitas, del interior de los centros penitenciarios del país.