El general director de Carabineros, Mario Rozas; y el ministro del Interior, Víctor Pérez, expusieron ante la comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara y definieron posturas respecto al procedimiento del pasado viernes en Plaza Baquedano, donde un menor cayó desde el puente Pío Nono al lecho del río Mapocho, tras lo cual un uniformado fue formalizado y acusado de haberlo empujado.
Ante dicha instancia parlamentaria, la máxima autoridad de la institución descartó renunciar a su cargo tras ser consultado por la diputada RD Maite Orsini, quien le señaló dicha opción ante las críticas a su figura y a la institución.
“Constantemente se ha pedido mi renuncia, pero tengo un mandato presidencial que cumplir y que es llevar, encabezar y liderar esta reforma que estamos llevando”, subrayó.
“Yo cuando asumo el mandato en esta institución, el mandato presidencial que se me ordena es de trabajar fuertemente en la modernización de la institución. Su Excelencia, el Presidente de la República, me advierte que no va a ser un trabajo fácil y que lo más probable es que iba a haber una transición para lograr esto. No se equivocó, porque realmente ha sido muy complejo, muy desgastante, sobre todo desde hace un tiempo a la fecha donde hemos tenido graves alteraciones al orden público”, añadió.
En tanto, respecto al episodio ocurrido el viernes, señaló que sí se socorrió al adolescente, pues hicieron la coordinación con Bomberos y el SAMU para que recibiera asistencia.
Según dijo, decidieron que personal policial no bajara al lecho del río porque en el personal estaba siendo agredido en ese momento: “Nos habría encantado bajar a los Carabineros, pero a lo mejor se habría expuesto a una situación bastante más complicada de agresión y también este joven pudo haber sido víctima de esas agresiones”, aseguró.