El Presidente Piñera decidió proceder al retiro formal de Chile de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), organismo en proceso de desintegración tras los anuncios de al menos la mitad de los países que lo conforman de abandonarlo.
El Gobierno dio a conocer la noticia a dirigentes oficialistas mediante una minuta, con el objetivo de socializar la decisión que espera informar en los próximos días al Congreso, que a su vez tendrá que pronunciarse al respecto pese a que su posición no sea vinculante, de acuerdo con La Tercera. Posteriormente emitieron un comunicado a través de Presidencia.
"En uso de las facultades constitucionales, el Presidente de la República ha decidido proceder a la denuncia, por razones de Estado, del 'Tratado Constitutivo de la Unión de Naciones Suramericanas', suscrito en Brasilia, República Federativa de Brasil, el 23 de mayo de 2008. Por lo anterior, de acuerdo a lo establecido en el artículo 63 de la ley N°18.918, Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, el Presidente de la República ha solicitado la opinión del Poder Legislativo", anuncia la misiva.
El texto justifica la salida de Unasur, fundado en 2004, debido a que "por años no se han realizado Cumbres Presidenciales, sosteniendo una burocracia regional onerosa para nuestros contribuyentes, absolutamente paralizada y alejada de los temas con real incidencia en el desarrollo de la región".
Asimismo, apunta que Chile se enfocará en fortalecer Prosur, foro del cual Piñera es uno de sus principales impulsores, "con una nueva mirada para enfocar la cooperación y el desarrollo con una estructura ideológicamente neutra, flexible, liviana, no costosa y con reglas claras de funcionamiento que permita avanzar de manera efectiva en entendimientos y programas concretos de integración en función de los intereses comunes de los Estados".
El año pasado los Gobiernos de Chile, Argentina, Brasil, Colombia, Paraguay y Perú habían decidido suspender su participación en Unasur; de esos, Ecuador ya dejó el organismo, mientras que Paraguay ya comenzó su proceso denuncia del tratado para desvincularse definitivamente, y Brasil anunció recientemente su salida.