El acuerdo entre el machi y el gobierno no fue visto con buenos ojos por Jorge Luchsinger, hijo del fallecido matrimonio Luchsinger-Mackay por el que Córdova cumple condena. “Para mí no es un líder, es un asesino que tiene que estar cumpliendo una condena, y esa condena son 18 años”, aseguró.
“Los beneficios que está recibiendo ahora, bien por él y su grupo de apoyo nacional e internacional que para nosotros no es bueno, pero es una cosa más de las que tenemos que soportar. Lo más importante ahora es que él continúe con su sentencia y que el gobierno haga el mismo o más esfuerzo por restaurar la paz”, agregó Luchsinger.
Respecto a los esfuerzos que hizo el gobierno, en particular el Ministerio de Justicia y DD.HH., señaló que “buscan evitar que esta persona, que es un delincuente, se transforme en mártir”.
Sobre el Convenio 169 de la OIT, que recomienda condiciones especiales para pueblos originarios de los países suscritos, Jorge Luchsinger aseguró que no se trata de un mal marco normativo, pero que en nuestro país se ha abusado de este.
“El problema es que aquí se usa y se abusa de algunos artículos, pensando que estas son imposiciones de un ente internacional, y no es así. Muchas cosas que he leído que algunos grupos de apoyo emiten tratan de ser una imposición, y ahí se transforma en una herramienta muy mala”, dijo.