Metro de Santiago anunció el despido de 23 funcionarios involucrados en el caso de licencias médicas fraudulentas destapado por Contralaría hace algunos días. A la vez, informó que hay otros 76 trabajadores que están siendo investigados.

En una declaración pública, la empresa estatal detalló que la investigación interna permitió identificar 188 casos sospechosos, los que involucran a 131 trabajadores que habrían salido del país mientras se encontraban con licencia médica. De ese total, 99 aún formaban parte del personal activo de Metro.

"De la revisión realizada hasta esta fecha sobre las 99 personas que son hoy trabajadores de Metro y, en mérito de los antecedentes tenidos a la vista, un primer grupo de 23 personas fue desvinculado por incumplimiento grave a las obligaciones del contrato y falta a la probidad", afirmaron.

"Los restantes casos (76) siguen siendo analizados con la máxima celeridad para adoptar las medidas correspondientes según la normativa interna de Metro y la legislación vigente, con el fin de sancionar cualquier irregularidad, como se ha hecho hasta ahora", añadieron.

Desde Metro aclararon que, dado que son una sociedad anónima propiedad del Estado y regida por el Código del Trabajo, no pudieron realizar sumarios, como fue el caso de las otras instituciones estatales involucradas.

No obstante, "Metro inició un análisis sobre cada uno de los casos contenidos en la nómina a partir de información interna adicional", con lo que pudo despedir a un primer grupo de funcionarios.

También explicaron que, una vez terminados todos los análisis, enviarán la información a la Compin o a la Isapre correspondiente de cada trabajador involucrado, "a fin de que estas instituciones tomen conocimiento, investiguen y ejerzan las acciones que correspondan dentro de sus propias atribuciones legales".

Cabe consignar que hace unos días renunció el gerente corporativo de la compañía, Patricio Baronti, quien también estuvo involucrado en el uso de licencias fraudulentas.