Participé con mucho entusiasmo en la marcha de Santiago y, aunque concurrió menos gente que en marchas anteriores, me sentí contento porque en 25 ciudades del país, otros miles de chilenos vencieron también la inercia que genera la desconfianza en los liderazgos de todo tipo y las debilidades que muestran muchas organizaciones sociales, gremiales y políticas.
No es fácil creer que un gobierno de derecha podrá hacer lo que gobiernos de centro izquierda No quisieron hacer. También si no se ven objetivos concretos que podrían ser alcanzados y que ayudan al objetivo central. Pero esos miles de personas que marchamos somos un testimonio vivo que la lucha debe continuar en diversos terrenos, en las calles, en los municipios, en las universidades y en el parlamento.
Sin soberbia, pero viviendo el problema, sabemos que tenemos la razón. Las AFP le hacen mal a Chile y a los afiliados. La experiencia propia y mundial nos indica que lo mejor para el país es un Sistema de Seguridad Social basado en principios que se aplican en casi todos los países del mundo, con las particularidades propias de su cultura y nivel de desarrollo. Así lo demuestra un reciente documento de la OIT, de enero de este año 2019, que nos entrega argumentos de extraordinario valor y que, aunque no tiene un carácter obligatorio, sí nos entrega antecedentes para demostrar las mentiras de los defensores y beneficiarios de las AFP.
El trabajo se titula “La reversión de la privatización de las pensiones: Reconstruyendo los sistemas públicos de pensiones en los países de Europa Oriental y América Latina (2000-2018), https://www.usp2030.org/gimi/RessourcePDF.action;jsessionid=IfGISY22gAXskXnJRusbRUmj-omB
El texto nos recuerda que “entre 1981 y 2014, treinta países privatizaron total o parcialmente sus sistemas de pensiones públicas obligatorias; en 2018, dieciocho países habían revertido las privatizaciones.” En Naciones Unidas hay reconocidos 193 países, de modo que no más del 15% concretó estas abusivas disposiciones, pero ninguno de los grandes países capitalistas tomó ese camino. Ni USA con Reegan o los Busch, ni Gran Bretaña con la señora Thatcher. En el restante 5% de países que se mantiene en esta desastrosa situación se encuentra Chile.
Esto ha ocurrido en un período histórico en que la distancia entre las élites y los pueblos ha dado lugar a las denominadas “democracias semi soberanas”, lo que sumado al derrumbe de la antigua Unión Soviética y la contaminación de las fuerzas progresistas humanistas cristianas y laicas por el neoliberalismo, permitió el fortalecimiento del capitalismo salvaje, con sus gravísimas secuelas negativas para los pueblos, que terminan pagando las cuentas de las crisis que generan la codicia y el individualismo. El documento de la OIT ya citado sostiene que “La mayoría de las privatizaciones recibieron el apoyo del Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), USAID y los Bancos Interamericano y Asiático de Desarrollo” y enfatiza que esas actitudes fueron contrarias a las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En la página 1 ya nos espera un subtítulo impactante.” La privatización de las pensiones: tres décadas de fracasos” y de la 7 en adelante, nos aportan algunas “ Lecciones tras tres décadas de privatización de las pensiones “ Entre ellas señalan las siguientes: a) Las tasas de cobertura se estancaron o disminuyeron; b) Los niveles de beneficios se deterioraron; c) Aumento de la desigualdad de género y de ingresos ;d) Los altos costos de transición crearon enormes presiones fiscales ;e) Altos costos administrativos ;f) Deficiencias en la gobernanza: captura de las funciones de regulación y supervisión; g) Concentración del sector de los seguros privados ;h) ¿Quién se benefició de los ahorros para la jubilación de los ciudadanos?” Esta pregunta tiene una respuesta muy directa: “El sector financiero; i) Efecto limitado en los mercados de capitales en los países en desarrollo; j) Los riesgos demográficos y del mercado financiero se trasladaron a los individuos y k) Deterioro del diálogo social” Chile muestra cada uno de esos fracasos.
¿Alguien tiene dudas respecto al daño que representa pagar el 20% de nuestros ahorros a las AFP para que nos entreguen una pensión misérrima, inferior al 30% de nuestras últimas remuneraciones, aunque nos ofrecieron el 70%? Es indignante que los defensores del sistema digan que es sustentable económicamente, sin decir que el costo lo paga el pensionado y Chile, como lo señala el trabajo que hemos citado.
¿Pueden negar sus defensores que nuestros fondos son usados dentro y fuera de Chile para fortalecer especulaciones y dañarnos también como consumidores? ¿De dónde obtiene fondos baratos los Bancos, las empresas sanitarias, eléctricas, de comunicaciones, de los supermercados y otras? Los sacan de nuestros recursos ahorrados por mandato de la ley.
¿Cómo podemos seguir permitiendo que nuestros recursos se vayan al exterior para favorecer inversiones de los grupos transnacionales y no se inviertan en nuestro propio país para generar empleo decente y mejor calidad de vida?
Un camino de mil millas comienza con un solo paso. Esta frase de Confucio nos permite esbozar algunos objetivos concretos.
¿Qué debemos hacer para fortalecer las acciones que se requieren?
1.- Debemos solucionar los conflictos por el liderazgo. La feria de las vanidades también nos afecta a los que luchamos y ello es negativo para nuestra causa. La lucha permite espacios compartidos y debemos perseverar en los encuentros. En lo personal, adhiero, me sumo sin protagonismo alguno a las actividades de diversas organizaciones, pero se hace indispensable pensar en conjunto como tenemos más fuerza. Por ejemplo, no podemos confundir las marchas familiares con movimientos partidistas o gremiales, ya que estas tienen sus características propias. Debemos tener algunas motivaciones que complementen el No + AFP.
Tampoco deberíamos convocar movilizaciones cuando hay actividades que son muy convocantes, como Lollapaloza, partidos de fútbol u otras actividades que atraen masas.
2.- Tenemos que establecer algunos objetivos concretos que permitan avanzar en el camino de los cambios de fondo. Ejemplos:
¿Alguien cree que hay votos y condiciones internas y externas para expropiar las AFP?
No hay votos para ello, y si hubiera, el Tribunal Constitucional se encargaría de evitarlo, los Tribunales demorarían años en resolver las demandas, los Tratados de Protección serían invocados y gobiernos muy poderosos nos pondrían problemas en nuestro comercio exterior. Además, habría que pagar las expropiaciones al contado. ¿Y todos estos problemas para qué
El capital más importante de las AFP somos nosotros, los afiliados. Si recuperamos el derecho a decidir dónde queremos imponer, AFP o INP, por ejemplo, nuestro derecho de propiedad prevalece, no hay contienda ni reclamo que valga. Los Fondos son nuestros.
¿Alguien se niega a luchar por una norma constitucional o legal que le permita a cada persona decidir si se queda en las AFP o se va al IPS? Es cierto que la iniciativa exclusiva de ley está en manos del Presidente de la República, pero sí no se consigue eso, es posible presentar una reforma Constitucional para reconocer este derecho. Es verdad, se necesitan dos tercios de los votos en el parlamento, difícil, pero nos permite intentar persuadir a políticos de diversos sectores y, además, poner en la vitrina pública a los que nos nieguen ese derecho básico.
¿Alguien niega que los funcionarios públicos antiguos, sub cotizados en los ochenta y que se afiliaron a las AFP son especialmente perjudicados por el sistema y que fueron discriminados respecto a los que se mantuvieron en el ex INP?
Los gobiernos han reconocido esto mediante medidas de parche, bonos de desvinculación que son pan para hoy y mañana y una larga etapa de vejez con pensiones de hambre. Las propias AFP lo reconocen y piden un bono especial administrado por ellas. ¿Por qué no reconocer el derecho de esas personas a decidir si reciben el bono especial o se cambian al IPS, dónde sacarían una pensión vitalicia del 80% de sus últimas remuneraciones
¿Alguien se niega a extender la Pensión Básica Solidaria a todos los actuales y futuros pensionados con cargo al aporte patronal? Eso significa un alza inmediata del 100% de 500 mil pensiones de Retiro Programado, más del 50% de incremento en las pensiones promedios con lo que superarían los $ 300 mil pesos mensuales y los nuevos pensionados partirían con un piso de $107.000, más lo que les corresponda.
¿Alguien se niega a que se cree un seguro de longevidad con cargo al aporte patronal y que permitiría recibir pensiones entre un 20 y un 25% más altas?
Tenemos que terminar con el abuso legal que le entregó a las AFP y a las Compañías de Seguros el cálculo de las expectativas de vida, tarea que debe volver al INE, pero complementando con una propuesta que tiene apoyo transversal y, además es un negocio para las compañías de seguros.
¿Alguien considera justo el artículo 45 bis del DL 3500 que les permite a las AFP expropiarnos un millón de dóalres diarios, sin siquiera informarnos?¿Alguien se opone a invertir nuestros Fondos para pensiones en Chile?80 mil millones de dólares, un Presupuesto Nacional completo se invierte en el exterior. ¿No sería mejor que nuestros empresarios pudieran disponer de más recursos con garantías e intereses apropiados para implementar programas en todas las comunas del país generando empleo decente y apoyando los programas municipales?
Existen otras propuestas que pueden unir. Abramos un diálogo creador sobre esto.
Hay también en el Congreso Nacional algunas buenas señales. Diversos partidos de oposición han acordado crear una Comisión Técnica para ayudar en la tarea legislativa. Conozco a varios de sus integrantes y me dan plena confianza. Debemos respaldar su tarea.
Pero no debemos excluir a parlamentarios de otras vertientes que quieran participar. Muchos de ellos saben que las pensiones son malas para todos y que no hay Bonos especiales para la gente de derecha. Yo he visto algunos en las marchas. No debemos excluir a quienes ayuden a una tarea nacional.
El sectarismo nunca ha sido una buena receta.A no bajar los brazos, a seguir marchando cada vez que podamos, a respaldar a los parlamentarios que nos escuchen, a pedirle apoyo a los Alcaldes y concejales.
El día de la justicia llegará. Así como vendrán las elecciones futuras que serán un test sobre las actuaciones gubernativas y parlamentarias si los ciudadanos, en vez de ausentarnos, nos involucramos.