Oh I'm just counting

Médico urgenciólogo celebra tres turnos sin intubar a pacientes COVID: "Volvimos a una normalidad parecida a la que teníamos en 2020"

"Fue un comentario a la vida". Así definió el urgenciólogo Alonso Miguel su publicación de este martes en Twitter, en la que celebraba haber completado tres turnos sin intubar a pacientes graves con COVID-19. Tras su posteo, rápidamente se volvió viral.

El médico de la Red Salud UC Christus expresó que todos los funcionarios de urgencia de la región Metropolitana indican que hay una tendencia a la baja de tres semanas.

Según explicó al medio citado, "estamos bien y eso es súper importante, pero todavía estamos sobreexigidos a un nivel en que nunca habíamos estado antes: tenemos un sobrecupo de camas UCI de por lo menos dos o tres veces la capacidad habitual de cada año".

"Logramos volver a una normalidad parecida a la que teníamos en 2020", sostuvo, agregando que comenzaron a notar la disminución "en el Hospital de la Universidad Católica hace unas dos semanas que ha ido disminuyendo la consulta de pacientes respiratorios sospechosos de COVID. En el Hospital de La Florida, un poquito menos. Hace una semana las salas COVID las hemos tenido que dar vuelta a salas no COVID".

El doctor Miguel, quien cumple hasta cinco turnos semanales de 12 horas cada uno, indicó que en el peak de hace un mes se llegaba a intubar a uno o dos pacientes por turno. Según explicó, "en el peor de los tiempos, recuerdo haber intubado a cinco pacientes en 12 horas y en junio del año pasado eran 10 pacientes en 12 horas. Fue muy terrible".

Ante ello, y luego de que la semana pasada no tuviera intubados por COVID, señaló que "me puse contento. Lo he comentado con mis colegas. En el hospital Sótero del Río, en el de la UC, en el Félix Bulnes, en el José Joaquín Aguirre de la Universidad de Chile se ha notado la baja. Entonces, es algo que sí está ocurriendo en Santiago".

El especialista sostuvo que el problema es el agravamiento de pacientes jóvenes que no se han vacunado, y que los adultos mayores que llegan a agravarse son una excepción.