La suspensión de las clases presenciales que se mantiene desde el 16 de marzo, a raíz de la pandemia por coronavirus, a 3,6 millones de escolares con la incertidumbre de cuándo deberán volver a los colegios, mientras en una parte de ellos han sido reemplazadas, estos meses, por clases remotas.
Y en tanto el Ministerio de Educación elabora un plan para llevar a cabo el retorno a las aulas, que se espera sea en las próximas semanas, también recibe diversas propuestas sobre cómo afrontar los efectos que ha provocado la pandemia en la educación.
Una de ellas es la entregada el 24 de abril por la Mesa Social Covid-19, que mandató a un grupo de expertos de varias universidades, entre ellas la U. de Chile y la U. Católica, cuyos rectores integran la instancia, para plantear medidas al respecto.
De acuerdo con La Tercera, que accedió a ese documento, se proponen medidas en base a tres ejes: el bienestar de las comunidades escolares; la priorización curricular, ajustes evaluativos y de gestión, y la educación remota.
En cuanto al primer punto, considerando el temor de las familias ante la posibilidad de que sus hijos pierdan el año escolar, es clave "evitar repitencias que pongan en riesgo las trayectorias escolares de los estudiantes", por lo que propone "entregar una señal clara de que no habrá repitencias posterior a la crisis sanitaria".
El académico Ernesto Treviño, del Centro UC para la Transformación Educativa, uno de los impulsores de la propuesta, expuso en el matutino que "la evidencia muestra que cuando tenemos una emergencia se tiene que apoyar el tránsito de los niños, para que esa emergencia no genere traumas ni consecuencias de largo plazo".
Cuidar metodologías, con enfoque formativo, y suspender Simce
Respecto a las clases a distancia, por vía remotas, se debe "cuidar que las metodologías sean pertinentes", y en el caso de las clases presenciales se sugiere "planificar una progresiva inmersión en contenidos de asignaturas, reconociendo que para el aprendizaje será indispensable primero lograr el equilibrio emocional", se lee en el documento.
En ese sentido, se plantea la creación un currículum de emergencia, algo que -según La Tercera- ya trabaja el Mineduc, y que éste sea válido por dos años, para que permita "trabajar con mayor intensidad las habilidades clave de cada asignatura".
Además, los expertos sugieren flexibilizar el Decreto 67 del Mineduc, sobre evaluación, calificación y promoción educativa, para "proponer criterios de promoción en base a evaluaciones formativas", foco que también ha sido planteado por Educación 2020.
La propuesta de la Mesa Social Covid-19 también apunta a la suspensión de las pruebas Simce de este año, que debían rendir los escolares de cuarto básico, sexto básico y segundo medio en octubre, para el 2021, pero manteniendo la fecha regular, ya que, como "el Simce mide aprendizajes de final de año, no tendría sentido una postergación para principios de 2021".