El obispo evangélico Eduardo Durán se refirió a las suspicacias por el robo que afectó a las oficinas administrativas de la Catedral Evangélica, ubicadas en la comuna de Estación Central.
“Frente a una serie de trascendidos, informaciones descontextualizadas y declaraciones apresuradas de algunos funcionarios de la Catedral, puedo informar que en los equipos sustraídos, como también en la caja fuerte y eventualmente en documentos que también podrían haber sido robados, no hay ninguna información referida a mi persona”, dijo Durán.
En la misma línea, agregó no tener “oficina ni computadores en el lugar en donde ocurrió el robo. Mi oficina, mi computador y todos mi documentos se encuentran en otro domicilio que es de conocimiento público”, enfatizó Durán.
Esto, porque está siendo investigado por la fiscalía, debido a su cuantioso patrimonio y por un posible lavado de activos.
Desde la Catedral se llevaron 12 computadores, además de documentos bancarios y contables de pastores, guardados en dos cajas fuertes, de un metro y medio y dos metros, respectivamente.