El obispo evangélico Eduardo Durán acusa "persecución" y asegura que críticas a su alto patrimonio por recibir y quedarse con 30 millones de pesos mensuales de los diezmos, son parte de "una operación política"
Aprovechó de hacer un llamado a la fiscalía para que se "formalice un proceso", de lo contrario solicitó que se haga público el fin de las indagaciones.
Como se sane, en 2017 la fiscalía abrió una investigación en su contra por el alto patrimonio que el religioso posee, lo que abrió las sospechas de eventuales delitos de lavado de dinero y fraude al fisco por parte de Durán, que tras asumir como obispo, de la noche a la mañana apareció con una gran riqueza.
Así lo aseguran pastores de su misma iglesia, lo que le llevó a declarar en calidad de imputado por el presunto lavado de activos ante la fiscalía de Alta Complejidad Oriente. Entre otros detalles, hace algunos días se reveló que en dicha instancia Durán señaló que recibe más de $30 millones mensuales por concepto de diezmo, los que estarían a su libre disposición.
En un video de cuatro minutos, Durán trata de desestimar las acusaciones, denunciando "una operación política destinada a silenciar nuestra posición valórica", donde el "objetivo de todas las acusaciones ha sido el obispo, Eduardo Durán Castro", agregó. "No es la primera vez y no será la última que nuestra iglesia enfrente persecución", sostuvo el pastor.
Y la razón de la persecusión, según Durán "curiosamente" comenzaron "desde que en el Tedeum de 2017, diéramos a conocer nuestra negativa respecto al aborto y a otras materias de ley que afrontaban los principios contenidos en las sagradas escrituras", de ahí en adelante "hemos sentido que somos objeto de una campaña de constante desprestigio", dijo.
Obviamente la culpa es de "Los medios de información (que) han dicho que hay enriquecimiento ilícito, negocios y todo tipo de cosas, incluso de la vida personal que han superado lo que se entendería como aceptable en el nivel de desinformación", añadió.
Y agregó: "no tenemos ninguna confianza en como los medios de comunicación tratan las informaciones referidas a nosotros. Señalan que la fiscalía me investiga, pero omiten una serie de detalles". "Hago un llamado a la fiscalía para que de una vez por todas formalice un proceso, si realmente tiene los antecedentes suficientes para hacerlo. De lo contrario, le solicito que haga público el fin de las investigaciones y esperamos por lo menos una disculpa".
Según el obispo Durán, "Luego de enterarme que la fiscalía realizaba una investigación, voluntariamente accedí a levantar el secreto bancario a fin de dar una total transparencia a mi situación (...). Nunca he sido citado a nada por la fiscalía. Lejos de eso, fui yo quien voluntariamente concurrí a la fiscalía a prestar declaración", aseguró el obispo, que por supuesto no dedicó un segundo a explicar qué hace con el dinero que gente de buena fe le entrega.
Durán denunció "el accionar egoísta y mezquino de algunos seudo religiosos que no pueden estar tranquilos ante el éxito y crecimiento de la catedral evangélica". "Con estas declaraciones damos por cerrado este capítulo de filtraciones, trascendidos y mentiras. No volveré a hablar sobre este tema y nos avocaremos como siempre a las tareas que nos demanda la iglesia, pues ese debe ser nuestro deber", concluyó.