Recordando las palabras de Gabriela Mistral, el Presidente Sebastián Piñera firmó, junto a la ministra de Educación Marcela Cubillos, el proyecto Aula Segura, el cual pretende sancionar de forma más eficaz a alumnos que incurran en hechos graves de violencia.
Si bien el envío de este proyecto de ley al Congreso estaba programado para la semana pasada, según informó la propia titular de Educación en el momento que comentaba los alcances de este, fue el propio Mandatario quien presidió la ceremonia, asegurando que los hechos registrados las últimas semanas no pueden repetirse.
A juicio del Mandatario, los incidentes protagonizados por “violentistas disfrazados de estudiantes” en el Instituto Nacional, Barros Borgoño y Liceo de Aplicación, “no son simples actos de indisciplina o meros desórdenes, son hechos delicuescentes que no son compatibles con las normas básicas de ninguna comunidad”, por lo que esta nueva normativa apunta directamente a ellos.
Como explicó, esta será una “herramienta útil para proteger el derecho a la calidad de la educación de todos los niños y jóvenes, y también el prestigio de los establecimientos”.
La idea central, entonces, será “fortalecer las facultades de los directores de establecimientos públicos y particulares subvencionados, incorporando nuevo procedimiento para permitir la expulsión o cancelación de matrícula de aquellos que permiten hechos delictuales y que afectan los derechos y la integridad de los miembros de la comunidad”.