La tradición indicaba que el presidente debía elegir para el cargo de jefe del Estado Mayor Conjunto entre cuatro generales del Ejército, sin embargo optó por nombrar de manera interina al almirante Rodrigo Álvarez de la Armada.
La decisión se adoptó ante las investigaciones que se instruyen en el Ministerio Público y en la justicia ordinaria por presuntos fraudes fiscales y que estarían involucrando a altos oficiales de la institución castrense.
Por lo anterior, el ministro de Defensa Alberto Espina, explicó que por ahora no hay conformación del nuevo alto mando de las Fuerzas Armadas, lo que impide nombrar de manera oficial al nuevo jefe del Estado Mayor Conjunto. Además reconoció que le tocaba el cargo al Ejército.
En uno de estos casos por presunto fraude en el ejército, el fiscal Carlos Palma cursó las citaciones para que declaren como testigos los exministros de Defensa, entre el periodo 2006 al 2016.
Se trata de Vivianne Blanlot, José Goñi, Francisco Vidal, Jaime Ravinet, Andrés Allamand, Rodrigo Hinzpeter, Jorge Burgos y José Antonio Gómez.