Un fallo inédito dio a conocer la Corte de Apelaciones de Valparaíso, pues el ministro en visita para causas por violaciones a los DDHH, Max Cancino, condenó a siete miembros en retiro de la Armada por el delito de secuestro con grave daño de un ciudadano dominicano. De esta forma, por primera vez se da cuenta de que un Estado, en este caso República Dominicana, se querella contra Chile.

Los funcionarios de la Armada en retiro Ernesto Leonardo Huber von Appen, Wilfredo Hernán Zepeda Iturriaga, Víctor Orlando Rey Ringele, Jaime Miguel Urdangarín Romero, Arístides Alejandro León Calffas y German Patricio Valdivia Keller; fueron condenados 15 años de presidio con inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos.

En tanto, Jorge Benjamín Ginouvés Contreras fue condenado a 5 años de presidio, con el beneficio de libertad vigilada.

Los hechos ocurrieron en septiembre de 1973 en la ciudad de Villa Alemana, donde Juan Andrés Blanco, ciudadano dominicano de 25 años en ese entonces, en razón de su orientación política, fue ordenado detener. Fue mantenido recluso en diferentes centros de la Armada, torturado y hasta hoy se desconoce su paradero. O sea es un detenido desaparecido.

En forma inédita, el Estado de República Dominicana demandó al Estado de Chile por los criminales hechos.

En el aspecto civil, el fallo acogió la demanda interpuesta y condenó al fisco a pagar una indemnización de $150 millones por concepto de daño moral, al padre de la víctima; y de $75 millones a un hermano.