"Lo que ella hizo fue agredir el derecho a la honra de una organización de 50 años con un prestigio internacional", dijeron desde el organismo muralista.

El recurso fue interpuesto por las Juventudes Comunistas junto a la Brigada Ramona Parra (BRP), este viernes,  en contra de la diputada RN de estrema derecha, Camila Flores, luego que ésta acusara al histórico colectivo de ser un "grupo extremista" que había asesinado a personas en el gobierno de Salvador Allende.

La BRP puso el énfasis en el “descrédito a la honra de sus miembros, efectuada por la autoridad parlamentaria en entrevista televisiva, donde aseguró que las BRP son un ‘grupo extremista’ responsable de asesinatos durante el gobierno de la Unidad Popular”.

El dirigente máximo de las JJCC, Camilo Sánchez, dijo que la acción de la diputada Flores “es otro intento más de intercambiar roles entre víctima y victimario, con el afán de poder justificar tanto la dictadura como los atroces crímenes de ese periodo”.

Para Sánchez, Camila Flores lo que “hizo fue agredir el derecho a la honra de una organización de 50 años con un prestigio internacional, que en Chile ha luchado por la democracia, la justicia y los derechos humanos. A diferencia de otros, la Brigada Ramona Parra pudiera tener sus manos manchadas con pintura, pero no con sangre”.

A esta acción judicial se suma la querella criminal por injurias que anunció la diputada Carmen Hertz, a quien Flores, en el mismo programa, acusó de haber incitado a tomarse Codelco en 1973 y matar a quienes se interpusieran. No existe registro alguno de tal llamado, teniendo además presente que Codelco comenzó a existir tres años después de la fecha señalada por la parlamentaria fundamentalista.

Además la ilustrada parlamentaria dijo que en esa misma fecha, durante el gobierno de la UP, el Frente Manuel Rodríguez había asesinado gente, lo que también está fuera de lugar porque el mentado movimiento nación en 1983, diez años más tarde.

La parlamentaria derechista ha mantenido sus dichos y ha mostrado, para acreditarlos, recortes de prensa que resultaron falsos al haber sido adulterados, según denuncias.