Oh I'm just counting

Carmen Castillo, la ex ministra de Salud que ahora es candidata a alcaldesa por San Felipe: Nunca imaginé que se volverían a violar los DDHH como ahora

Entrevista que aparece publicada en el Semanario Cambio21

Por María Cristina Prudant

La ex ministra de Salud del gobierno de Bachelet, Carmen Castillo es independiente, pero cuenta con el respaldo del Partido Socialista en su postulación a la alcaldía de San Felipe, porque puede ser una alternativa. De hecho ganó en la primaria y su único norte, dice a Cambio21, es que se hagan las cosas bien. Su padre fue militante del PS, “muy querido”, quien trabajó en la Comisión contra la Tortura, en Derechos Humanos. Ella inició su carrera como doctora en San Felipe y vive allá hasta hoy. Cuando era ministra viajaba todos los días a Santiago.

¿Por qué tomó usted la decisión de postularse como alcaldesa de San Felipe?
Bueno, veía yo la alternativa de poder aportar, de dar todo lo que es posible dentro de los conocimientos que yo he adquirido durante mi trayectoria en el servicio público. Yo llevo más de 37 años en el servicio público en que he podido conocer mucho. Desde la salud pública, se manejan mucho las determinantes sociales por lo tanto, esta área de la alcaldía que sí tiene otro componente que tiene que ver con más trabajo de terreno propiamente tal, que no solamente es focalizada al aspecto salud.

Es una oportunidad de poder dar con un equipo sólido que pueda refrescar la forma de trabajo de una municipalidad, que en este momento que hay una situación muy especial que tiene que ver con el estallido social, con la pandemia y que necesita tener oportunidades en las cuales hay que dar respuesta a lo que la comunidad está planteando en Chile, en distintas localidades, en muchos sectores, por los diálogos que se efectuaron, por los mismos alcaldes que hicieron esas consultas ciudadanas.

Los alcaldes han logrado un reconocimiento por el trabajo que han hecho durante la pandemia y han demostrado que pueden solucionar muchos problemas más de la gente. ¿Qué le parece a usted?
Absolutamente. Algo que llamó la atención y tal vez por el primer llamado de alerta del 18 de octubre que por ejemplo, cuando comenzó la pandemia los alcaldes dijeron no vamos a mandar a los niños al colegio y se adelantaron incluso a las indicaciones del gobierno. Han dado la pauta en muchas situaciones, estos diálogos comunitarios que efectuaron también para poder recoger las inquietudes de la comunidad también se adelantaron a cualquier decisión del gobierno adelantándose a muchas decisiones que después el gobierno acogió como necesarias y eso precisamente las validó ante la sociedad, la comunidad como personas que tenían más conocimiento de la realidad de las distintas localidades del país que las autoridades que están en el nivel central que, muchas veces, no tenían esta cercanía que es tan importante de poder opinar con fundamento, con información que los alcaldes tenían a su disposición  porque tienen cercanía con las organizaciones sociales, con las organizaciones vivas de las comunidad, con todas las ONG que trabajan a nivel local, con los líderes comunitarios, juntas vecinales tanta información que ellos tienen que muchas veces les dan fondos específicos hacia un tema ellos dicen por favor dennos un margen  para también dar curso a otros intereses de la sociedad porque ellos tienen mucho más cercanas las necesidades de la gente.

Respecto a la pandemia ¿cómo ha visto usted el manejo sanitario de las autoridades del gobierno?
Teniendo, tal vez, posibilidades de escuchar más, las oportunidades no han sido acogidas en su totalidad y consideramos que una de las falencias que ha tenido este gobierno ha sido las comunicaciones. Muchas veces no fueron muy claras y precisas, las indicaciones de salud que son tan necesarias, a veces, eran contundentes y esto hizo que muchas veces no se tomara en su real dimensión lo que significa esta pandemia. Inicialmente, además se consideró que eran muy hospital céntricas todas las acciones. Se concentró en los ventiladores mecánicos e los hospitales y no le dio importancia a la atención primaria que recién en julio la incorporó como un tema importante la promoción y la prevención. Eso sí que fue un error táctico que es muy importante el haber ojalá evitado que se enfermera la gente.

Ahora, en este momento y se superó la desinformación de las cifras, otras situaciones que fueron criticadas al inicio de la pandemia. Pero, igual uno tiene que estar muy abierto a la flexibilidad porque por ejemplo, esta nueva cepa que está apareciendo en el Reino Unidos y en otras partes del mundo están apareciendo otras cepas, uno tiene que estar muy flexible y esto obliga a ser muy rápidos, hay que reaccionar con inmediatez y estar muy bien informado para poder, ojalá, decidir en base a lo que la comunidad también puede responder. Esto tiene toda una conexión porque aquí al día de hoy lo que se necesita es que la comunidad esté muy bien informada y que también tenga una alta participación. La participación comunitaria es necesaria porque es la única forma de lograr el compromiso, no es por miedo, es por convencimiento que la gente tiene que mantener la distancia física, la mascarilla, el lavado de manos o el alcohol gel.

 ¿Dónde se contagia la gente?
Esos elementos que son tan básicos no se están cumpliendo a cabalidad ahora, uno ve y donde más se contagia la gente, lamentablemente es en eventos sociales familiares, más que en los otros porque la distancia ahí prácticamente no existe, se abrazan porque somos tan de piel. Lamentablemente, tenemos que tener un autocuidado y eso permite que uno cuide a sus familiares más cercanos, especialmente los adultos mayores que son los que más riesgo están corriendo. La presión hospitalaria está muy demandada en estos días también por enfermedades que no son del coronavirus, son otras que son descompensaciones, complicaciones que no se controlaron oportunamente por situación del coronavirus que hizo que todo se focalizara en el coronavirus y se dejó de lado las listas de espera, los pacientes que estaban en sospecha de algún diagnóstico y eso es un gran peso que hay.

¿Qué opina usted sobre el aumento del narcotráfico y delincuencia en el país?
Muy preocupante, pero hay que buscar estrategias en conjunto con la comunidad y mire si ahora ninguna estrategia puede ser utilizada sin la participación ciudadana en la cual ellos tengan derecho a opinar. Esto, precisamente no se puede tomar la ley por sus propias manos y ahí hay que tener mucho cuidado porque estamos casi en el límite de esto. Porque en este momento se está discutiendo el uso de armas en personas que no son parte del orden y seguridad sino que son personas naturales que quieren tener su propia forma de repeler cualquier situación de riesgo y todo esto puede ser una escalada muy riesgosa para nuestro país. Efectivamente, es una realidad uno no puede desconocer, en todas partes estamos teniendo situaciones de riesgo y esto hay que tenerlo muy bien trabajado, muy bien elaborado y con estrategias ojalá los más claras posibles. Hay que comenzar en la educación de los niños, el aprender a decir no para ojalá no caer en esta situación de riesgo de drogas.

Con el estallido social en el país se volvieron a violar los derechos humanos y hay jóvenes detenidos por manifestarse. ¿Cuál es su opinión al respecto?     
El tema de los detenidos tiene que ser visto caso a caso, seguramente debe haber situaciones de personas que no han cometido delitos y otras si y por supuesto tienen una situación diferente. Esto tiene que ser tratado con mucha amplitud y con todo lo que significa revisar también los derechos de las personas. Aquí todos tenemos que tener la apertura para buscar las mejores soluciones y es preocupante, no es una situación normal. Una cosa que es muy importante en la sociedad, que después del estallido social se consultó por distintas vías cómo se podía llegar a una paz social en nuestro país, cómo podríamos llegar y el 97% por distintas encuestas, estadísticas y todo dijeron que si se superaban las desigualdades podríamos llegar a tener paz social.

Entonces, hay algo aquí que deberíamos tener muy claro que hay que enfrentar ya las desigualdades que son una realidad y tenemos que enfrentarlas como corresponde y uno de los componentes es precisamente, las formas de expresión que tuvieron que ellos decían que no había otra forma más que la vía de la violencia. Discutible, pero la cosa es que hay que tener claridad de que hay situaciones que hay que revisar que, seguramente están siendo descontextualizadas o emitieron una mirada diferente.

El tema de los derechos humanos es el talón de Aquiles del gobierno. Nadie esperaba que después de la dictadura vendría tanta represión y otra vez se violan los derechos humanos. ¿Qué opina al respecto?
Realmente nunca me imaginé que íbamos a volver a tener una situación en la cual nos miraran desde afuera con una crítica tan dura por la violación de los derechos humanos en el país, como lo fue en la dictadura. El hecho de haber dejado dañadas más de 400 personas con daño ocular, pérdida de la visión, incluso hay estudios internacionales que dijeran que esto fue fuera de lo común, no se logra entender que fue lo que pasó en Chile, que todo parecía menos violento hicieron tanta reacción en la cual los derechos humanos, precisamente es uno de los elementos que hay que tener claro y enfrentarlo. Este es un tema que hay que trabajarlo con todas las entidades que estén abiertas a escuchar también las opiniones que se tienen de ello y la Defensoría de la Niñez es un tema muy importante. Cada área exige y nos hemos olvidado de un grupo que en este momento debe necesitar mucho apoyo que es el adolescente. Este joven que no tiene por donde expresarse, además con la pandemia ha tenido que estar muy aislado. Hay que buscar soluciones para lo que ellos plantean, que tengan una válvula de escape que no sea una cuestión que comprima y que se sientan parte de la sociedad.   

Estamos a las puertas de un logro histórico como es poder cambiar la Constitución. Viene la elección de constituyentes y la oposición no llega a acuerdos para enfrentar ese importante desafío ¿Qué opina?
Hay una palabra que significa unidad, el otro proceso inclusivo. Tenemos que trabajar siendo generosos, si no lo somos también de incorporar a todas las entidades que son representativas y no nos quedamos siempre con quien tiene más poder, más facilidades de llegar a ser parte del proceso constituyente vamos a tener una situación, nuevamente  de mala apreciación del proceso. Cuando la Presidenta Bachelet trabajó el proceso constituyente en todo el país hay un insumo potente que se puede trabajar, socializar, existen las fórmulas. Si no nos unimos vamos tener una situación bastante poco representativa de lo que nosotros queremos como sociedad.

En cuanto a la carrera presidencial se conoció hace unos días que la ex ministra, Paula Narváez podría ser candidata presidencial y cuenta con el apoyo de la Presidenta Bachelet. ¿Cómo lo ve usted?
Lo primero es felicitar a la ex ministra Pula Narváez por el coraje. Yo creo que en este momento es una necesidad tener alternativas desde el punto de vista de la mirada es la mujer también. La mujer es importante y ojalá esté en los puesto claves de un desarrollo de la sociedad y uno de ellos es el gobierno como Presidenta y creo que cuenta con todo un sentimiento de respaldo de que existe la posibilidad de que una mujer, en buena lid, pueda postular y tenga la posibilidad de ser Presidenta.     

La nueva ola y no vacunarse son riesgos altos  

Respecto a esta segunda ola ¿usted cree que nos va a pegar fuerte a nosotros?
Está al alza, es preocupante, si no tomamos en serio esto sí puede pegarnos fuerte y más si es que tenemos estas cepas nuevas que son muy contagiantes, que dicen que serían menos agresivas, pero por sumar con más cantidad hay más gente que se puede complicar, no necesariamente porque es la primera cepa pero en este caso las mutaciones es algo que uno sabe que vienen.

Ahora, la vacunación es una gran esperanza, sí, y hay que vacunarse y hay que darle crédito a todo este trabajo que se ha hecho, que ha sido de mucha responsabilidad por distintas entidades que sí han sido controladas para que pueda finalmente responder a los requerimientos de la población, pero igual uno tiene que mantener el autocuidado a pesar de vacunarse. Porque esto obliga a que se vacune, ojalá, el 80 % de la población y si no llegamos al 80% va a ser un riesgo igual sanitario en el poder contagiarse.    

Toda una vida en San Felipe

¿Usted pertenece a la ciudad de San Felipe porque eso es importante para la comunidad a la hora de elegir una autoridad?

Claro, yo vivo en San Felipe y cuando fui ministra de Salud yo viajaba todos los días. Yo nunca dejé de vivir en San Felipe, para mí esta ciudad es toda mi historia. Mi historia laboral comenzó en San Felipe. Alcancé a estar un mes en un Cesfam en Santiago, pero después de que me recibí al mes me vine a San Felipe y toda mi vida laboral la he hecho aquí, como médico tratante primero en el área de la pediatría después seguí avanzando en todo lo que significa gestión. Fui directora del Servicio de Salud y finalmente tuve el honor que la Presidenta Bachelet me nombrara ministra de Salud y con lo cual pude conocer todo Chile, en su real dimensión sanitaria.

Uno conoce la historia de San Felipe, porque cuando llegué era muy diferente, estoy hablando de hace 40 años atrás, yo llegué el año 80 a la ciudad, entonces lo conozco muy bien, todo su desarrollo, cómo se implementó el Hospital de San Felipe y ahora todas las necesidades que tiene para un nuevo Hospital que hay que considerarlo con todo los avances tecnológicos y con todas las modalidades que se están implementando en la forma de trabajo de una institución tan importante como es la salud.