Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano, acusados de delitos tributarios y  cohecho asociado al financiamiento ilegal de campañas políticas en el marco del caso Penta, culparon al Ministerio Público de incumplir la promesa mediante la cual se les aseguraba un juicio abreviado si cooperaban con la investigación.

"El Ministerio Público no cumplió su acuerdo y, aún más, en la audiencia de formalización y posterior revisión de medidas cautelares, se usó mi declaración en mi contra y, por eso, considero que mi declaración se obtuvo en base a un engaño", dijo Délano en un testimonio entregado al fiscal regional oriente, Manuel Guerra, el pasado 26 de julio, citada por La Tercera.

En la misma línea, Lavín declaró un día más tarde que “si renuncié a mi derecho a guardar silencio fue porque confié en el acuerdo que teníamos con la fiscalía y jamás me imaginé que la fiscalía podía incumplirlo. Por lo anterior, mi declaración fue obtenida bajo engaño”.

Los excontroladores de Penta volvieron a hablar ante la fiscalía por petición de su abogado, Julián López, con la intención de dejar constancia del supuesto engaño.

En enero de 2015, Délano y Lavín confirmaron la veracidad de los hechos investigados. Délano reconoció haber autorizado apoyos monetarios a diversos candidatos, pero recalcó que nunca se involucró en la materialización de dichos aportes. Lavín, en tanto, ratificó "los dineros que Jovino (Novoa) pedía no eran para él, sino que para candidatos afines".

"El 31 de diciembre de 2014, mi abogado Julián López había afinando un texto de minuta con el fiscal Normabuena por lo que querían hacerle una revisión final con el fiscal Carlos Gajardo, quien no estaba el 31 de diciembre. Luego fue revisada el 5 de enero antes de que yo prestara declaración por el fiscal Carlos Gajardo junto a mi abogado", dijo Lavín en su testimonio de julio.

"Había un 100 % de acuerdo en los puntos de un juicio abreviado (…) al día siguiente yo llegué tranquilo a declarar debido a que conocía todo este proceso que estaba terminando bien", agregó.

Lavín destacó además que "entre mi declaración del 6 de enero y la formalización de marzo, ocurrieron hechos que conmovieron a la opinión pública relativos a la empresa SQM y el escándalo generado con el caso Caval. Eso trajo mucha agitación en la fiscalía y terminó con el fiscal nacional de la época con participación activa. Los fiscales Gajardo, Norambuena y Arias tomaron el caso Penta y sus aristas. En ese ambiente, se realizó nuestra audiencia, habiéndose comunicado un día antes que no se nos reconocería colaboración sustancial".