De todo pasó en el Te Deum "por la Patria" de este domingo en la Catedral Evángelica de calle Alameda con Jotabeche. Pero la grotesca preparación del maltrato hacia la presidenta Bachelet se realizó días antes, con la anuencia del jefe de esta Iglesia, Eduardo Durán, padre del pastor (Eduardo Durán Salinas, en la foto, con Piñera) que habló desde el altar y quién de manera escandalosa pidió el apoyo a los candidatos de la derecha en la próxima elección presidencial y parlamentaria. Incluso él mismo es candidato a diputado en el distrito del sector sur poniente de Santiago.
Cómo se planificó la encerrona de los evángelicos a Bachelet: desde la alocución del candidato-pastor, los aplausos a Piñera y las groserías a la mandataria
Por Alfredo Peña
El obispo Emiliano Soto, presidente de la Mesa Ampliada de Iglesias Evangélicas, aseguró que los ataques que sufrió la Presidenta Michelle Bachelet durante el Te Deum evangélico fueron un "aprovechamiento político".
Durante su participación en la ceremonia religiosa de este domingo, la Mandataria fue objeto de ataques y gritos que la calificaron de "asesina" y "vergüenza nacional".
En la instancia, además, Eduardo Durán, hijo del reconocido obispo del mismo nombre y candidato a diputado por Renovación Nacional (Chile Vamos), usó el altar de la Catedral Evángelica para lanzar una verdadera proclama de proselitismo político contra las propuestas valóricas del Gobierno.
Todos estos actos fueron calificados por el obispo Soto como un "aprovechamiento político y también un llamado a la instrumentalización de la Iglesia Evangélica la cual nosotros definitivamente no compartimos".
"Acá hay gente que milita en partidos políticos que infiltró el programa de los evangélicos", sacó como conclusión de su análisis.
Groserías organizadas días antes
Pero todo el evento -con groserías a la Mandataria- fue preparado días antes.
Según conoció Cambio21 de fuentes de la propia Iglesia Evángelica, cuando el polémico Obispo Eduardo Durán Castro, (una especie de Cardenal según la Iglesia Católica), dió autorización a que su hijo, el candidato de la derecha, militante RN y exGobernador del Ñuble de Piñera, Eduardo Durán Salinas, subiera al altar a entregar la "palabra de Dios" a los asistentes: todos sabían que iban a un acto político más que a uno religioso.
Seguidores de los Durán se colocaron fuera de la Iglesia y le gritaron "asesina" a la Presidenta Bachelet mientras las tropas del Ejército le rendían honores militares.
Luego, esos mismos partidarios (aparentemente rentados) de los Durán, a los que se incorporaron otros, lanzaban gritos en contra de Bachelet, ubicados estrategicamente en distintos sectores de la Catedral. Esos fueron los que comenzaron los aplausos cuando los parlantes anunciaron a Sebastián Piñera, el único aplaudido en el supuesto acto religioso.
¿Sabía Piñera o sus asesores de esta encerrona que se le iba a realizar a Bachelet y a sus ministros?
Eso sólo lo sabe el mismo exmandatario y sus asesores.
Una particularidad sobre este punto no deja de llamar la atención: el jefe del comando de Piñera, Andrés Chadwick, envio rápidamente un tuiter luego del ´grosero acto político-religioso: "Hay momentos, como el #Tedeum de hoy, que no solo sobran las palabras sino que emocionan..."