Por Alfredo Peña

Para la diputada y vicepresidenta de la DC, Joanna Pérez, este año ha sido no sólo duro y complejo para el país, sino que se ha evidenciado “un pésimo manejo del Gobierno, con una profunda indolencia”.

 Ha sido crítica a la administración de Sebastián Piñera en materia sanitaria, económica y social; y ha impulsado una serie de proyectos que han sido criticados desde La Moneda pero que, a su juicio, “responden a las demandas de los ciudadanas y ciudadanos que, a su juicio, “no han tenido la respuesta oportuna por parte de un estado ausente”.

Después del masivo apoyo de los ciudadanos a la opción Apruebo y Convención Constitucional el pasado 25 de octubre, y considerando todas las elecciones que vienen, cómo ve el escenario electoral ¿Será posible mantener este nivel de participación?

 Creo que en la medida que los ciudadanos y ciudadanas entiendan que es necesario fortalecer la democracia no solo con un Plebiscito sino que con las futuras autoridades que se van a elegir donde se ha dado más espacio, por ejemplo para primarias, para que las personas elijan a los candidatos finales que van a ir a determinadas elecciones, yo creo que es probable que la gente vaya a votar, porque también quiere ser partícipe de probablemente más renovación, de nuevas ideas, de personas que están hoy día siendo parte del nuevo Chile que requiere un impulso distinto, también del liderazgos.

 Creo que sí puede ser posible que vayan muchos más jóvenes y en la medida que cuidemos esta pandemia y un proceso seguro como lo ha hecho Servel y poder inclusive implementar en su minuto alguna posibilidad de voto a distancia o voto anticipado como lo está haciendo la Comisión de Gobierno Interior, que presido, probablemente podamos ir aumentando la participación. Debe ser un desafío permanente. 

La Convención Constitucional será paritaria, y usted es la única mujer en su bancada, qué relevancia le otorga a este hecho, el de la paridad. ¿Qué ocurre aún que a las mujeres les está costando tanto acceder a cargos de representación popular y de toma de decisiones?

 Aún siguen existiendo muchas barreras para que las mujeres puedan ser candidatas, por eso era tan importante lograr la ley de cuotas en cargos colegiados, ya sea en concejos municipales y en consejos regionales. Lamentablemente desde el Senado no ha salido humo blanco en esta instancia que es tan importante, pero más allá de eso creo que todos los partidos, las organizaciones civiles y los movimientos que han avanzado en materia de paridad, en los derechos de las mujeres de representadas en futuros procesos eleccionarios y constituyentes como lo es la paridad, hoy día tienen mucha relevancia.

 Hoy es muy importante la agenda de candidatos y candidatas en materia de una agenda de mujer como por ejemplo una agenda libre de violencia en todos los aspectos, el no permitir más abusos y brechas donde las mujeres hoy por ejemplo en temas laborales las mujeres están muy atrasadas y queda mucho por avanzar. Creo que nos haría muy bien en los futuros procesos llevar a muchas mujeres y elegir a muchas mujeres en espacios de mujer para ir rompiendo también la brecha de participación femenina.

Los partidos políticos están en entredicho; las encuestas reflejan una profunda desconfianza de la ciudadanía. A su juicio y a la luz de todos los hechos vividos, ¿cuáles son los cambios que se requieren para recuperar la credibilidad?

 Los partidos políticos efectivamente están en una crisis, pero no solo ocurre con los partidos, también con otras instituciones como carabineros, iglesias y otros. Por lo tanto, lo que hay que hacer para recuperar la confianza no solo en los partidos políticos, sino que, en nuestras instituciones, es dar espacios a nuevos liderazgos, a propuestas que también sean realizables, tener una mayor sintonía con la ciudadanía para canalizar sus demandas y poder llevarlas ya sea a trámites legislativos o también a través de la política pública en poder incorporar esas demandas.

 Demandas que sean totalmente sociales y que busquemos también entre todas y todos, con un compromiso país por la unidad y por el fortalecimiento de la democracia salir adelante. Los partidos políticos tienen un rol, no hay democracia sin partidos políticos y probablemente entendemos que hoy días estos deben estar quizás en segunda línea o dándole espacios a independientes y a movimientos que han logrado conectar con la ciudadanía, pero en ningún caso no considerar a los partidos políticos porque también tienen un rol dentro de la sociedad.

Pero si los partidos políticos están en cuestionamiento, el Gobierno del Presidente Piñera lo está aún mucho más. ¿A tres años de esta administración, cuales diría usted que has sido sus principales falencias?

Creo que el gobierno del presidente Piñera ha tenido varias problemáticas que han afectado obviamente su programa y por tanto también hay un agotamiento entre las propuestas y lo que hoy día la ciudadanía espera, por eso está el estallido social donde viene a poner en relieve todos los temas que están inconclusos, desde la descentralización, el tema de pensiones, el tema de equidad, más solidaridad, de no dejar a nadie atrás, de estas brechas de segregación que se han ido generando.

 Pero también las diferencias sociales, en una inequidad donde en muchos aspectos, hay una falta también de control por parte del Estado y de fiscalización donde se demuestra que las personas siempre son más perjudicadas que incluso la gran empresa y las industrias, en relación a la fiscalización;  al uso de los recursos públicos, aquí se ha notado un centralismo agobiante y un híper presidencialismo donde luego de una pandemia y un estallido, el gobierno no ha logrado sintonizar ni entender lo que la ciudadanía demanda.

 Desde La Moneda se ha querido gobernar a través de decretos, pero también con el Tribunal Constitucional, amenazando muchas iniciativas ciudadanas y por cierto a través de los vetos que son una evidencia del hiperpresidencialismo que ahoga a nuestro país, tanto en las comunas y regiones. El centralismo también es algo que hoy día demuestra, por ejemplo en relación  con los municipios, las brechas en relación a los recursos que reciben y a la forma como ellos deben responder ante la ciudadanía.

 El  que hoy día tengamos descontentos desde lo territorial pero también en los temas nacionales, refleja que  hay mucho que trabajar allí y este gobierno no ha logrado empatizar con esas necesidades en lo social, en lo económico y en lo sanitario. La pandemia la hubiésemos podido resolver de una manera distinta si hubiésemos considerado a los municipios, a los territorios, a la salud municipalizada e instrumentos de apoyo desde la vocación productiva más que en temas tan amplios y focalizados en instrumentos que dejan afuera a tantas personas que lo necesitan.

 Frente al Gobierno las demandas son muchas, desde el respeto a los DDHH hasta la forma en que se ha manejado la pandemia y el apoyo a las familias- Considerando que las manifestaciones sociales continúan, cual es el rol que hoy deben asumir quienes tienen un mandato popular. Se ha criticado a los parlamentarios por impulsar proyectos “inconstitucionales”, pero paralelamente la aprobación del Congreso ha subido. ¿Cuál es su visión al respecto?
 
El Congreso ha debido salir al paso de un gobierno indolente que no ha estado a la altura de las circunstancias en lo social, económico y sanitario, es por eso por lo que hemos debido recurrir a la ley Anti Cortes, al postnatal de emergencia, el retiro del 10% y otros proyectos que van en sintonía para dar un apoyo en esta pandemia a las familias. Lamentablemente el gobierno ha sido lento, ha sido burocrático, tenemos a muchas pymes que aún no reciben apoyo en circunstancias que la gastronomía, el turismo y gran parte del comercio ha estado muy devastado con esta pandemia y pese a todas las garantías estatales que el gobierno nos ha permitido aún seguimos sin prestar apoyo para gran parte de estos sectores, por eso creo que el gobierno debe entender cuál ha sido el rol del congreso y por eso la ciudadanía valora y está muy atenta a lo que el Congreso esté realizando porque ve que están siendo canalizadas sus demandas que nos señalaron en el estallido social y por cierto para la reactivación económica post pandemia.  

"Tenemos un desafío en la Convención Constituyente que es llevar a los y las mejores candidatas y candidatos"

Finalmente, y considerando que la elección de los constituyentes hoy genera gran interés en la ciudadanía, ¿a quienes le gustaría ver en la Convención y que temas ve como prioritarios en la construcción de esta nueva constitución?

Creo que el proceso constituyente es una gran oportunidad para poder plasmar ahí los desafíos y cambios que Chile espera con motivo de esta histórica posibilidad de escribir una nueva Constitución para los próximos 10, 15 y 20 años en adelante. Y por eso es tan importante que este órgano tenga una buena representación ciudadana y que los partidos podamos plasmar los mejores constituyentes, con una buena participación de la organización civil, de independientes, pero también de militantes que hoy día pueden aportar a este proceso.

Y, por cierto, plasmar ahí el sueño país desde la mirada de las regiones, de la descentralización, de corregir este hiperpresidencialismo, de garantizar los recursos naturales y poder dar una mirada mucho más social y sostenible a nuestro país y a los sistemas de protección social, no solo garantizar derechos, sino que accesos a lo que es educación, salud, vivienda, y tantas materias que hoy día hemos estado conversando en nuestro Congreso Ideológico. Viene un proceso muy importante e interesante de gatillar este proceso constituyente, de hacer que Chile dialogue por la unidad y por sacar adelante tan necesarias materias que hoy día han quedado relegadas, abandonadas y que son de interés ciudadano.