El diputado del Movimiento Autonomista Gabriel Boric fustigó las críticas en su contra luego de que este domingo se conociera que se reunió con Ricardo Palma Salamanca en Francia, el ex frentista condenado por el crimen de Jaime Guzmán, según informa Bíobío.
La respuesta de Boric se dio luego de que el diputado de la UDI, Juan Antonio Coloma, expresara en su Twitter que el parlamentario era "doble estándar". Además de las descalificaciones de la presidenta de la UDI y de los diputados Javier Macaya e Issa Kort.
"Tu partido entero fue en caravana a visitar al dictador Pinochet y a rendirle honores mientras estaba detenido en Londres por crímenes contra la humanidad. Yo he condenado asesinato sin matices. No me vengas a hablar de doble estándar", enfatizó Boric.
Por su parte, desde el Frente Amplio, el diputado del Partido Humanista Tomás Hirsch defendió que "Boric está en todo su derecho" de reunirse con el ex frentista y afirmó que "no le veo el drama que le están poniendo algunos".
"Creo que todavía no está prohibido reunirse con cualquier persona en cualquier país", ironizó, apuntando que "una cosa es que Palma Salamanca esté condenado por la justicia chilena, y otra que se pueda reunir en un viaje y tener un diálogo en relación con un tema que a él (Palma Salamanca) le estaba interesando, que era justamente su petición de asilo".
"Y si eso le parece a la UDI que es un asunto que está prohibido, entonces que hagan las demandas correspondientes en los tribunales", emplazó.
En la misma línea, a Rodrigo Hidalgo, integrante del comité de apoyo al asilo político de Palma Salamanca, le parece que la reunión -sobre la cual no tenía conocimiento- fue parte "de lo que ha sido la campaña, de ir sumando personalidades del ámbito público, en este caso político, que van entendiendo las razones de por qué se estaba solicitando refugio".
Asimismo, rechazó los intentos del Gobierno de revetir la protección otorgada por Francia al ex frentista: "Primero, llegaron muy tarde, nosotros empezamos a hacer nuestro trabajo hace más de ocho meses, y el Gobierno intentar revertir en un mes algo que es prácticamente imposible, en ese sentido los palos de ciego que ha dado el Gobierno son llamativos, ha atacado al Gobierno francés de forma reiterada".