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Diputado de La Araucanía Mario Venegas a Cambio21 por Estado de Sitio: “La derecha más dura cree que es la solución, pero habrá más violencia”

Entrevista que aparece publicada en el Semanario Cambio21

Por María Cristina Prudant

El diputado Mario Venegas conversó con Cambio21 acerca de la situación que se vive en la región de La Araucanía, donde ha aumentado la violencia. El legislador es oriundo de esa región de la provincia de Malleco, donde fue gobernador. Siempre ha vivido en su zona por ello dice que le llama la atención quienes están instalados en Santiago y hablan de las soluciones para la región sin conocerla.

Recuerda que Piñera “tiene una deuda enorme con esta región porque precisamente aquí obtuvo el respaldo mayoritario en su elección Piñera. Porque su promesa fue devolver la paz y la seguridad y además un Plan Araucanía especial de apoyo a la región y todas han sido promesas incumplidas”.
 
Ha recrudecido la violencia en La Araucanía y el gobierno reacciona con anuncios y llamados a la unidad que al final quedan en nada. ¿Qué le parece a usted?
Creo que una vez más el gobierno parece no tener un  acercamiento en profundidad al problema que afecta a esta macrozona sur como la han llamado el último tiempo. Y tiene acciones que son reactivas, que tienen más como un cierto interés de responder a determinados grupos de presión, hablarle a ciertos nichos electorales que, resolver el problema en toda su complejidad y profundidad. El gobierno ha fracasado completamente en lo que fue su promesa de traer paz, garantizar el orden público y la seguridad ciudadana en la región. Muchos casos sabidos como la operación de la CAM que viene de antes, pero luego el caso Catrillanca, los comandos Jungla, el nombramiento de un coordinador, que se difundió como una gran solución  y que no ha resuelto nada, al contrario lo que ha acontecido es que ha recrudecido la violencia y lo que diría es que se han dado hechos que han tenido un impacto mediático más importante porque la verdad que nosotros convivimos con violencia toda la semana, todos los meses y desde hace varios años, dos décadas y ha ido en una espiral de aumento en términos cuantitativos y desde el punto de vista cualitativo cada vez son más graves los hechos.

¿Y qué opina de la posibilidad  que se imponga un Estado de Sitio en la zona?
Siento que esto del estado de Sitio es un profundo error porque al final, creo yo, que es intentar apagar el fuego con bencina porque sin duda a los grupos más radicalizados que han usado la violencia como elemento de lucha, bueno, esto va a ser una justificación para su continuación y profundización de esa estrategia. Ahora, nos condenan al conjunto de los ciudadanos que vivimos acá a que nuestras libertades individuales se restrinjan significativamente, con todo lo que ya están restringidas, a propósito de la pandemia. Recordemos que estamos con toque de queda ya casi un  año, ahora se alarga en una hora, pero sigue siendo una vida bastante complicada más para aquellos que están con cuarentena. En lo concreto, no creo que sirva, creo que puede ser, incluso, contraproducente. Sé y tengo claro que hay muchos sectores, especialmente de la derecha dura que creen que esta es la solución, pero habrá más violencia, porque una vez cuando usted saca a los militares a involucrarlos en el tema de la mantención del orden público y la seguridad ciudadana que es tarea prioritaria del gobierno, del Ministerio del Interior y de las instituciones que la Ley mandata para eso como son  carabineros y otros, creo que podemos entrar a una escalada de violencia muy compleja. Lo peor es que no se hace cargo del problema de fondo, que  es que los habitantes de La Araucanía hemos estado condenados a vivir con violencia.

Cada vez es más inseguro transitar por los caminos, hay más miedo y uno lo conversa de manera cotidiana. El trasladarse de un punto a otro, el pasar determinados caminos, que son públicos, ni que hablar de los interiores, uno se puede exponer a recibir un balazo, encontrarse con un camino cortado, quema de vehículos. Y eso, de alguna manera no ha sido abordado desde el Estado central en la profundidad que requiere para construir respuestas integrales, no reacciones puntuales. Porque si la gente cree que este es un  problema estrictamente de orden público y seguridad, está equivocado, es un problema mayor. Es un problema político mayor que es la relación del Estado de Chile con sus pueblos originarios y en particular con el pueblo mapuche acá en esta macrozona sur.

¿Qué opina usted de los rumores que corren respecto a la participación de carabineros en los hechos de violencia en La Araucanía. Usted le merece alguna duda todo esto que se especula?
No, para los que vivimos acá, que hemos jugado un rol público y hemos tenido contacto con  estos problemas esto no es nada nuevo que haya montajes, conflictos de interés entre las empresas de seguridad y las grandes empresas forestales de la zona. También se conoce hace tiempo el tema del narcotráfico, robo de madera, robo de vehículos. Así ha ido escalando la dinámica de este proceso en nuestra Región y la verdad que, de autoatentados y de acciones de esa naturaleza, montajes siempre se ha especulado sobre la materia. Siempre hay casos sospechosos, pero lo grave es que yo responsablemente, como autoridad política, no puedo hacerme cargo de eso y debería esperar que la instituciones a cargo de darnos garantías actúen adecuadamente y no lo han hecho. Si no lo han hecho, yo también vi esas denuncias de este ex funcionario de carabineros, oficial, empresario hoy día ligado al tema forestal y es brutal. Si es que tenemos a altos mandos de la institución participando activamente en asociaciones ilícitas para delinquir como es robar madera, para hacer montajes, la verdad que estamos en el peor de los mundos y uno se pregunta: bueno y…cómo hacemos para que estos organismos funcionen y si a eso lo suma a una serie de otras decisiones de cómo está degradada interiormente la institución de carabineros y cómo se hace necesario una profunda refundación de carabineros para que sea un servicio efectivamente de todos los chilenos sin distinción y deje atrás prácticas tan oscuras.

 La verdad que es tremendo, pero no tengo como comprobar porque no es mi tarea, eso debiera ser tarea de los tribunales que han mostrado una ineficacia enorme. Precisamente porque estas instituciones no le prestan todo el apoyo o no son eficientes a la hora de reunir las pruebas que permitan descubrir quiénes están detrás de los atentados y luego sancionarlos conforme establece nuestro ordenamiento jurídico y entonces sentimos que hay una suerte de impunidad y cuando usted conoce todos estos elementos colaterales usted dice: claro les interesa que esto se mantenga. Porque hay plata de por medio, porque hay gratificaciones, bonos especiales que reciben aquellos que están destacados en la zona. A las empresas privadas grandes, por décadas le han  cuidado los fundos con recursos del Estado que son de todos los chilenos.

¿Cómo se resuelven esos temas, como se encuentra una solución?
Yo creo que la única manera es que de una vez por todas el Estado, no hablo del gobierno porque es problema de este gobierno que se agrave por su ineficacia, su inoperancia, pero debo reconocer que en los gobiernos anteriores tampoco, se hicieron esfuerzos pero no se abordó el problema en profundidad. Esto es un problema del Estado de Chile, es un problema político de la mayor envergadura, del conjunto de los chilenos no solo de nosotros los que vivimos aquí en la Región, nosotros sufrimos los efectos y entonces, hay que mirar todas las distintas variables que explican este fenómeno que por lo demás hemos dejado que se vaya alimentando solo, adquiriendo más fuerza, más vigor con todos los efectos indeseados que tiene.

En esta situación, diría usted que se requiere mucha voluntad política para solucionarla. Por qué no se hace, por temor?
Porque objetivamente hay una línea delgada entre la especulación y la realidad. Yo hace muchos años que empecé a escuchar que en la zona de Ercilla, había droga, plantaciones de marihuana, era comentado, pero no tenía certeza. Ahora ha ido quedando en evidencia que, efectivamente eso que se planteaba era real, que abigeato, robo de vehículos, que robo de madera en la zona de Collipulli, que en la provincia de Arauco una verdadera industria del robo de madera. La pregunta es: esa madera termina llegando al punto donde se mete en el sistema productivo de la celulosa, pulpa o madera, aunque tú la robes, si estamos hablando de miles y miles de pulgadas que ser transportada que tiene que llegar a un punto. Una opacidad enorme respecto cómo funciona esto.

¿Los empresarios, camioneros de esta zona, que están siendo perjudicados están conscientes de que existen todos estos aspectos oscuros que complican la situación?
Ellos están conscientes, ellos sufren objetivamente todos los efectos más graves de este conflicto. Lo que pasa es que no tenemos un consenso respecto de qué manera se aborda la solución de este problema. Los empresarios agrícolas están pidiendo Estado de Sitio y pidiendo que los militares colaboren porque, claro, ellos entienden que mano dura es la respuesta. Yo tengo mis dudas acerca de si eso es lo más apropiado. O sea, digamos lo siguiente, para que no se me mal entienda, yo creo que el Estado tiene que cumplir con  su obligación de garantizar el orden público, la seguridad ciudadana, perseguir los delitos, sancionar, etcétera. Yo no estoy hablando de impunidad, digo que no es suficiente eso que hay que hacer otras cosas en paralelo que aborden los distintos problemas.

Lamentablemente, aquí son muchos los perjudicados porque de 10 comunas pobres 4 o 5 son de La Araucanía.
Este nivel de violencia lo que ha significado es un atraso enorme para la Región, quien en estas circunstancias se atreve a invertir, a proyectar una inversión de mediano y largo plazo como puede ser una inversión en el ámbito agrícola, algún desarrollo de algún proyecto que tenga un alto impacto en  generar puestos de trabajo. Y eso qué significa pobreza para la Región, particularmente la provincia de Malleco que yo represento y que es donde vivo. Ercilla, Lumaco, Traiguén, en fin. No faltan estudios que han profundizado en el problema de la Región, como uno que hizo Alberto Espina, la mesa que se conformó y que inició el obispo de la región y hay otros documentos muy interesantes como el del senador Huenchumilla, que fue Intendente. Que a mí me parece muy lúcido cuando explica por qué el tema tiene que abordarse en su integralidad y lo plantea como un tema político de la mayor envergadura.

¿Y cómo deberían enfrentar las autoridades el problema global de La Araucanía?
El Estado de Chile se va a hacer cargo de la realidad de La Araucanía y la macrozona sur. Si se quiere hacer cargo y terminar con la violencia tiene que darse a la tarea de tener la voluntad política para abordar el tema en serio. Diálogo, conversación, negociación incluso no hay que tenerle temor a eso, si alguien cree que esto se va a resolver involucrando a los militares que van a ir con bala pasada, entramos en el peor de los mundos. Dónde ha resultado eso.

Proyecto por el robo de madera

Piñera mandará un proyecto especial para el robo de madera al congreso. ¿Qué opina?
Será necesario, si nuestro ordenamiento tipifica el robo de cualquier especie si hay una organización criminal detrás de eso. No sabemos si el problema es que no se encuentran nunca a los responsables. Agréguele esta joyita que presumiblemente, de acuerdo con las denuncias, entre ellas las hechas por un ex oficial de carabineros, los propios policías estarían involucrados en estos delitos. O sea, la institución llamada a investigar y a aportar las pruebas a los tribunales es parte de. Estamos mal.

Responsabilizar al Congreso
 
Piñera le pidió a los parlamentarios que aprueben los proyectos de ley que enviará al Congreso. Se repite la misma estrategia que ha usado para presionar al Parlamento.

Si es como una cantinela, es un discurso como aprendido para desviar la pelota al córner. Lo que buscan es centrar la responsabilidad en el Congreso y así aminorar su propia responsabilidad. Eso es tan evidente. Ahora, eso no quita que uno esté dispuesto a analizar y a discutir leyes que eventualmente puedan colaborar, pero es que pasan gato por liebre entonces meten cuñas, hay tantas bien reprobables como muchas que tienen que ver con el estallido social. Cómo se pueden confundir, yendo tras el perfeccionamiento de una herramienta legal para alcanzar el objetivo de combatir los delitos como a través de esa ley pueden tener una herramienta para en los hechos poner amarres a todo lo que ha sido la manifestación social. Ese es el tema, no es menor cuando uno se enfrenta a la discusión de un proyecto de ley de esta naturaleza. Develar cuáles son los intereses que, en realidad, están detrás de la motivación. Si a mí me demostraran que están de verdad interesados en la región de La Araucanía, yo estoy disponible a aprobar todo, pero no lo veo así.