Félix González, timonel del Partido Ecologista Verde y diputado electo por el distrito de Concepción y Talcahuano con 18.380 sufragios, no está contento con la decisión de Beatriz Sánchez, excandidata presidencial del Frente Amplio, como lo fue anunciar que votará por Alejandro Guillier en la segunda vuelta.

 

Ni siquiera la fallida denuncia efectuada por el abanderado de Chile Vamos, Sebastián Piñera, respecto a la existencia de votos marcados en la primera vuelta en favor de Guillier y Sánchez justificaba aquello, manifestó el dirigente, que en diálogo con Cambio21 criticó la actitud “ambigua” que a su juicio han mostrado los principales referentes de la colectividad.

 

 

 

- Por supuesto que lo que ella pueda decir va a tener un efecto político o varios. Sin embargo, la gente que votó por el Frente Amplio, cerca de 1 millón 300 y tantas mil personas, no son votos acarreados. Nosotros como conglomerado no acarreamos gente en buses o auto. Es gente que se informa, que quiere a Chile, que fue a votar y que quiere cambios. Entonces, no me cabe duda que hace mucho rato que esas personas tienen una decisión tomada.

 

- A ver, los dirigentes políticos, los presidentes de partido, como es mi caso, o la excandidata presidencial, no podemos darnos gustos personales. No existe para nosotros la posición personal sin que eso afecte a quienes representamos. Por lo tanto, lo que correspondía era que se respetara los acuerdos. Además, ella hizo de vocera, leyendo el comunicado (30 de noviembre), y unos días después hace algo contradictorio.

 

- Bueno, las posiciones que se han expresado desde el FA en los últimos días -nosotros hacemos la crítica también a quienes han hecho de voceros-, han sido ambiguas. Y esa ambigüedad está dada porque no todos comparten esta postura mayoritaria del FA de no respaldar al duopolio y entender que cualquiera de las dos candidaturas (Piñera y Guillier) no se trata de votar personas, sino que por coaliciones. Y las dos coaliciones representan los mismos intereses económicos y del modelo de desarrollo. Quienes no están de acuerdo con esto, debieran dentro del marco que se acordó no apoyar a ninguno de los dos y ser consecuente con eso. Entonces, algunos están buscando de qué manera poder hacer apoyos explícitos, como el de Beatriz, tratando de disfrazarlo de que son posturas personales. O sea, si son posturas personales el secreto de la urna es donde tiene que estar. Lo mismo acaba de pasar con Vlado (Mirosevic, diputado reelecto del PL), que en la intimidad va a votar por Guillier, pero en la intimidad de la portada de La Tercera. ¿Qué intimidad es esa? Hay una contradicción entre lo que acordó el FA y vocereó la misma Bea hace unos días atrás y lo que hizo el lunes.

 

- Eso se ha definido como ambigüedad, y yo estoy de acuerdo. No está claro para la gente cuál es el camino que cada uno está tomando y qué es lo que se quiere transmitir. Y si aspiramos a ser gobierno en cuatro años más tenemos que ser capaces de tener mucha claridad en los planteamientos. El Partido Ecologista Verde, desde hace dos meses, que viene declarando lo mismo, porque nos preguntan lo mismo, lo de nosotros era trabajar por la campaña de Beatriz Sánchez y no estar anticipadamente, como lo hicieron Nueva Democracia, Izquierda Autónoma y Revolución Democrática. Carla Antmann (Nueva Democracia), candidata a diputada por Valdivia, se reunió con el comando de Guillier antes de la primera vuelta; RD planteó un plebiscito cuando todavía no se votaba la primera vuelta; Francisco Figueroa (IA) planteó acuerdos programáticos con Guillier y todavía no se votaba la primera vuelta. Nosotros decíamos que había salir a hacer campaña. Y el tiempo nos dio la razón. La primera vuelta estuvimos a dos puntos de ganarle a Guillier. Si ellos se hubieran dedicado a hacer campaña en vez de estar reforzando lo que decían las encuestas Cadem y CEP con un escenario derrotista, tal vez ahí estaba el porcentaje que faltaba.

 

 

- Creo que las decisiones estratégicas del FA no pueden estar supeditadas a las tonteras que diga Piñera. Decir algo que es contradictorio con el acuerdo que hay requiere que todo el FA -si hay un cambio- tome la decisión. No que la excandidata presidencial se arrogue la representación habiendo sido levantada su figura por una coalición. Ella no fue candidata por sí, lo fue por una coalición. Fue a una primaria y tuvo un respaldo endosado, el cual no es para que ella considere que es propio o que no va a tener efecto. No es proporcional el que Piñera diga una estupidez, que no es primera vez, con un cambio en la postura de un conglomerado que consultó a sus comunales (más de 100), a sus 13 organizaciones que tomaron sus definiciones con diversidad, para luego tomar una postura común. Y eso pocos días después se contradice. Además, queda en evidencia que esa decisión Bea no la tomó el lunes. Ella misma lo dice.