Con el cambio de Alcaldes y Alcaldesas elegidos el 26 y 27 de octubre, la figura mejor evaluada de la derecha en las encuestas Evelyn Matthei (UDI) inició su maratón presidencial en un escenario electoral "líquido" que según los resultados electorales de octubre y diciembre con voto obligatorio se ve abierto, competitivo e incierto -a pesar de que las encuestas dan ventaja a Matthei-.
Es más, en las últimas horas se puede ver un video donde cambia sus zapatos por zapatillas que dice "Evelyn" como marca. Nos imaginamos para esta maratón al que aún resta un año para la segunda vuelta.
Las recientes elecciones mostraron que la derecha y sus diversos candidatos tienen severas limitaciones o techos electorales. La ultraderecha ya sea con candidatos republicanos o con José Antonio Kast o el emergente Johannes Kaiser en segunda vuelta no son competitivos y no logran el ansiado 50% más 1 voto.
La ultraderecha no logró el apoyo electoral que esperaba: sólo sacó 13% de votación en los Concejales, no ganó ninguna Alcaldía relevante, tuvo derrotas fuertes en la segunda vuelta de gobernadores y hoy tiene más concejales, pero sigue siendo un partido dependiente de José Antonio Kast y solo Kaiser pareciera amenazar su liderazgo con una inesperada y sorpresiva arremetida en las encuestas. Kaiser con un liderazgo tipo Milei o del presidente hungaro quiere desbancar a la derecha conservadora y a la ultra derecha que representa Kast.
En la centroizquierda y en la izquierda -superado el triunfalismo del 24 de noviembre de la 2ª vuelta en gobernadores regionales- se empieza a dar cuenta que sus posibles presidenciales están marcando muy poco en las encuestas, que la ciudadanía quiere liderazgos competentes, con buena gestión y ahí tiene nombres atractivos para la ciudadanía como Claudio Orrego y Tomás Vodanovic, pero tampoco hay claridad sobre la estrategia electoral -¿habrán primarias presidenciales que pueda encauzar una sola opción amplia desde el PC/FA al PDC o habrán 2 candidaturas presidenciales una de la izquierda-izquierda y otra de la centroizquierda progresista desde PS,liberales, PR, PPD y PDC?-.
Vendrán meses de intenso debate político en ambos sectores donde se puede prever que en la derecha Kast ni Kaiser irán a primarias y que Matthei para legitimar su opción deberá ir a una primaria con alguna candidatura RN u otra como la de Rodolfo Carter, pero ganando esa primaria "poco competitiva" o más que nada "como una cachetada de payaso", en la práctica no le aportaría mucho más a lo que ya tiene en las encuestas.
La duda es si Matthei buscará crecer al electorado moderado con un programa presidencial más transversal donde a su línea pro crecimiento económico le agregue un componente de compromisos sociales que le permita sumar nuevos apoyos de electores de centro. Para eso deberá convencer a los líderes o lidereza de los partidos Demócratas, Evopoli o Amarillos para que participen de esa primaria amplia.
En el caso de la centroizquierda hay varias dudas sobre la maratón presidencial. Tohá inició su despliegue presidencial promocionando su logro de tener un Ministerio de la Seguridad, después de 18 años de debate legislativo; pero este Ministerio dejó heridos en el camino como son los Gobernadores Regionales los que no fueron considerados en el diseño regional del Ministerio y Tohá prefirió reforzar la figura del Delegado Presidencial (que Boric comprometió eliminar) y crear un Seremi de Seguridad.
Los partidos chicos como Liberales y PDC probablemente llevarán a primarias a sus opciones presidenciales como Mirosevic en los Liberales y Flores o Undurraga en el PDC; dicen que PR estaría en conversaciones con MEO.
Hay un sector del PC que le gustaría levantar la opción presidencial de Daniel Jadue, en el Frente Amplio perciben que Tomás Vodanovic dirá que no y anuncian repatriación de Beatriz Sánchez desde la embajada en México y en el PS aspiran a convencer a Michelle Bachelet o terminarán apoyando a Carolina Tohá o a Claudio Orrego que con su triunfo en la 2ª vuelta de gobernadores con 2,5 millones de votos se convierte en un candidato competitivo para una centroizquierda anclada en la buena gestión y en la transversalidad del Gobernador.
La centroizquierda debe hacer una adecuada lectura de las recientes elecciones y debiera percibir que la mayoría de la ciudadanía se agotó de la polarización, del discurso descalificador y quiere opciones fundadas en la buena gestión, con capacidad transversal de unir a diversos sectores en torno a una agenda concreta de mejoramiento de la condición de vida de las familias chilenas, donde la seguridad en los barrios, la recuperación de la calidad educativa y disminuir las listas de espera en los hospitales públicos son cuestiones claves y prioritarias para la próxima elección presidencial.
En esa cancha los sectores democráticos tienen potentes opciones como Claudio Orrego y Tomás Vodanovic y la derecha solo tiene a Evelyn Matthei, porque el resto de los candidatos de la ultraderecha solo conectan con ese tercio de un electorado duro y polarizado.
Será una larga maratón presidencial, pero el progresismo democrático tiene opciones si sintoniza con esa mayoría ciudadana que pide personas con experiencia y competente para elegir nuevo Presidente de la República y ya no quiere amateurismo en ese cargo.