Por María Cristina Prudant

 

María Antonieta Saa es conocida por su vasta trayectoria política que la llevó a ocupar el cargo de vicepresidenta en la mesa directiva del PPD. En 1986, fue electa dirigenta de la Asamblea de la Civilidad y colaboró en la fundación de la Concertación de Mujeres por la Democracia. Al año siguiente, se integró a la Directiva Central del Partido por la Democracia (PPD).

 

En 1990, el presidente Patricio Aylwin la designó alcaldesa de Conchalí. Impulsó el Consejo Comunal del Niño y Niña, y el Consejo del Adulto Mayor. Asimismo, creó el Centro de Apoyo a la Mujer Víctima de la Violencia Doméstica, el Programa de Apoyo para la Mujer Jefa de Hogar y los Servicios Educativos para Niños.

 

En 1994 postula como diputada por el distrito 17, siendo electa desde esa fecha para los períodos legislativos 1994-1998; 1998-2002; 2002-2006; 2006-2010. En diciembre de 2009 fue reelegida para el periodo 2010-2014. Desde el 6 de agosto de 1997 hasta el 11 de marzo de 1998, fue primera vicepresidenta de la Cámara Baja.

 

El 13 mayo de 2012 participó en las elecciones internas de su colectividad representando la lista "Un PPD para el Nuevo Chile" que obtuvo el segundo lugar con el 36,3% del total de los sufragios. En 2013 fue electa Consejera Regional (CORE) on una alta mayoría, por la Circunscripción Provincial Santiago I, periodo 2014-2018, correspondiente a las comunas de Renca, Conchalí, Huechuraba, Pudahuel y Quilicura. Una vez asumida en el cargo se integró a las comisiones de Educación, Ordenamiento Territorial e Internacional.

 

Actualmente es presidenta del Movimiento Por la Interrupción Legal del Embarazo (Miles Chile), organización que promueve los derechos reproductivos de la mujer y la despenalización del aborto​.

 

Cambio21 conversó con la ex diputada y actual Core sobre el desarrollo del actual gobierno y la contingencia tanto política como social.

 

 

Uno pensaba que estaban mucho más preparados para gobernar porque habían tenido mucho tiempo y la verdad es que ha sido una sorpresa el que no estaban tan preparados. Primero, que les costó la instalación  uno se da cuenta que no tienen mucha gente para colocar en cargos gubernamentales y claro, en algunos cargos se fue a la segura el Presidente, con Chadwick, Cecilia Pérez, Larraín en Hacienda. Esa es una sorpresa yo creía que tenían los cuadros más estudiados de los que se harían cargo de las responsabilidades.

 

Segundo, también pensaba que era tal su oposición al gobierno de Bachelet que tenían una batería de proyectos para avanzar en la dirección de su programa y resulta que no fue así. Recién ingresó el proyecto de la Reforma Tributaria, que para ellos es fundamental, su viga maestra.

 

Entonces, encuentro que no ha sido un gobierno efectivo que les ha costado mucho, creo que las cifras de la disconformidad de la ciudadanía ya crecieron y creo que van a continuar en esa línea. 

 

 

Creo que ellos hicieron un muy buen trabajo de candidatura. Entonces, mucha gente se ilusionó con la seguridad económica, puestos de trabajo y pasan siete meses y eso no se ve. Creo que las críticas a Bachelet fueron un boomerang porque la situación internacional que ellos no reconocían se dan cuenta que los afecta ahora a ellos de manera bastante importante porque por más que destaquen las cifras de la economía en alza y que la inversión, pero uno ve que no avanza y la gente no lo siente.

 

 

No lo logro visualizar eso, pero sí la tirantez entre los conservadores y los más laicos y los núcleos  progresistas con el apoyo del gobierno a la ley de identidad de género se nota que por ahí va a haber un estallido, una trizadura grande. No sé que va a pasar con los evangélicos, que el apoyo era irrestricto que, incluso Renovación Nacional le abrió las puertas a estos pastores, es horroroso y hoy día los evangélicos no ven que están con ellos en su misión de ahuyentar al demonio de la sociedad chilena. Ahí hay una crisis de apoyo bastante grande, lo vimos en el Tedeum en que (obispo) Durán dice que todo se conversa al interior porque todo el mundo estaba esperando que le griten cosas a Piñera como le gritaron a Michelle. Y ocurrió lo que se imaginaban: le gritaron hasta traidor a Piñera.

 

 

 

Hay una gran fracción del mundo evangélico, que no fue al Tedeúm con los más conservadores como el obispo Durán y todos los más conservadores. Dejaron fuera al obispo Emiliano Soto.

 

 

Piñera no las tiene todas con él. A este gobierno no le veo la firmeza o la robustez para llevar a cabo una contra reforma, por ejemplo, de la Reforma Tributaria, cosa que me parece muy positiva.

Escuché a la ministra de Educación que en el tema de las salas cunas y jardines infantiles que iba a haber una especie de vuelta atrás en el copago, sin embargo hoy la escuché y dijo que no habrá copago, que no se volverá atrás. Lo que me parece muy positivo por la tremenda reforma que se hizo en términos de la educación pública.

 

 

 Bueno, ese es otro flanco, que los divide también. Y eso se notó en el discurso de Piñera en La Moneda (acto ecuménico por el 11 de septiembre) donde hace un énfasis, si bien dice que no hay justificación ninguna para las atrocidades de la dictadura, sin embargo habla del contexto, o sea, es un alma dividida, hay absolutamente una división entre ellos.

 

 

Ni siquiera todos ellos, yo creo. Parece que al final lo acompañó la señora no más, no había más gente.

 

 

Claro y con un ( José Antonio) Kast que sigue haciendo proselitismo, que tuvo el 8%, que sigue recorriendo el país y levantando una ultra derecha retrógrada y conservadora y fascista derechamente. Creo que Piñera no las tiene todas claras, no sé lo que irá a pasar. Va a ser un gobierno difícil, creo que va a tener bastante problemas por el hecho de no tener mayoría en el Congreso. Trataron de hacer una prueba de fuerza con el tema del salario mínimo y tuvieron un percance muy grande y tuvieron que retroceder y se da cuenta que no puede gobernar sin el acuerdo con el Congreso.

 

 

La reforma Tributaria va a tener cambios en su proyecto original, cosas que le va a traer de nuevo problemas con el empresariado. Van a tener que negociar sino no podrán hacerlo. Es bastante difícil el panorama para el gobierno.

 

 

Otro tema candente por estos días son los problemas de contaminación en Quintero-Puchuncaví Qué le parece como lo ha tratado el gobierno.

 

Lo de Quintero lo trataron muy superficialmente al principio, la ministra venía entrando y la declaración y condena de la Enap, que fue precipitada, o sea, la gente los vio enfrentar los problemas de forma muy precaria, una crisis tan grande y profunda como esa, pero la manera de enfrentar la crisis fue bastante débil y bastante compleja.

 

Bueno y antes de esto toda la crisis ministerial que debió enfrentar. Cómo se le ocurre poner como ministro de Educación a Varela, cuya actuación fue vergonzosa. Los problemas en el ministerio de Salud, uno nota como una improvisación que no esperábamos.

 

 

Esa es una espina que la van a tener siempre porque todos los días la Michelle está en la tele. Es como un fantasma que lo tienen ahí y reaccionan de manera muy burda. La actitud de Evelyn Matthei pidiendo que le quitaran el sueldo, fue muy vergonzoso. Es algo que uno decía si hubiera sido una actitud distinta, porque la gente reconoce que es un tremendo cargo, que es un tremendo honor para el país. Les afloró la pica y el que se pica siempre pierde.

 

 

Se van a ir viendo las fracturas, así como se ha visto la fractura nuestra con las nuevas expresiones de izquierda, se está viendo entre las derechas, muy fuerte. Creo que pueden terminar muy fracturados políticamente. De hecho el gobierno ya tiene problemas con algunos proyectos de ley con el ala más conservadora de la derecha.

 

 

Esa sala penal, donde están los ministros acusados ha sido bastante buena. Y a lo mejor si se ganaba la acusación quizás que ministros iba a nombrar Piñera. Si nombró a la Angela Vivanco hay que imaginarse. No estoy de acuerdo en que los indulten, pero la acusación constitucional a los ministros es bien jodida.

 

No es un gobierno fuerte como nos imaginábamos, que no tiene un rumbo claro, tiene dificultades grandes en temas que le importan a la gente, que tiene dificultades con el Congreso, no van a poder hacer la Reforma Tributaria, que es el corazón de este gobierno, no les va a ir bien, van a tener que llegar a acuerdos.