El fiscal nacional, Ángel Valencia, detalló su idea de construir una cárcel a la cual sean enviados exclusivamente los cabecillas del crimen organizado, siguiendo un modelo acuñado en Italia.

Valencia explicó que, durante su primera cuenta pública, planteó que "en el ámbito penitenciario, tener a personas en las cárceles no impide que se siga delinquiendo desde adentro hacia afuera, ni tampoco que se cometan delitos en su interior".

Por lo mismo, señaló que "queremos que se haga una cárcel especial para los líderes del crimen organizado, tal como se hace en Italia".

"Han habido esfuerzos del Gobierno muy positivos respecto de rehabilitar dependencias que estaban fuera de uso, con el objeto de aumentar la capacidad para privados de libertad (en recintos de) máxima seguridad, pero lo que hemos sostenido es que necesitamos hacer un esfuerzo que vaya más allá, o sea, desplegar toda nuestra capacidad privativa y todo el confinamiento que tenemos para tener cárceles efectivas", emplazó el persecutor.

Valencia volvió a subrayar la relevancia de la experiencia italiana, dado que "crearon nuevas cárceles respetando los estándares europeos en materia de derechos humanos", según consigna radio Cooperativa.

"Es posible hacer más, hacer cárceles estrictas, severas, a las que los condenados teman ir, (porque de lo contrario) van a seguir delinquiendo", advirtió, y reafirmó que su objetivo sea privar de libertad a "los cabecillas del crimen organizado, no a cualquier imputado".

Por otra parte, atribuyó las demoras en diversas causas de corrupción a una falta de fortalecimiento de la Fiscalía, "entre otros motivos", y reiteró su compromiso por acelerar la obtención de resultados.

"Cuando asumí como fiscal nacional, dije que íbamos a tener especial celeridad en los casos de cuello blanco, que íbamos a avanzar en esas investigaciones y en la persecución de esos delitos pase lo que pase", recordó.

Valencia admitió que "todos quisiéramos resultados más rápidos en investigaciones de esa materia, pero a veces nos pesa demasiado la (falta de) dotación -no sólo en Fiscalía, también en las policías- y la complejidad de los casos, porque se trata de personas que tienen habilidad para disimular sus actividades ilícitas, una gran cantidad de documentos y computadores que hay que analizar, cuentas privadas y cuentas institucionales".

Una de estas investigaciones es la que aborda un eventual desfalco en la Municipalidad de Vitacura, que a pesar de sus avances, todavía no acusa formalmente al supuesto líder de esa operación, el exalcalde Raúl Torrealba.

Al respecto, el líder del ente persecutor dijo confiar en que el fiscal que lleva el caso, Xavier Armendáriz, "vaya a tomar decisiones lo antes posible respecto a los principales responsables en esos hechos de la causa, que son muy, muy graves".