La Fiscalía reformalizará el próximo 19 de octubre, a las 09:00 de la mañana, en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago a los 10 imputados por la muerte de la menor Lissette Villa, principal arista del denominado caso Sename.

La niña de 11 años falleció en abril del año pasado en el Cread Galvarino, de la comuna de Santiago, por presuntas contenciones y uso de fármacos. Entre los reformalizados se encuentran la ex directora del centro Mónica Monje y las cuidadoras de trato directo Cintia Galaz y Orfelina Valdés.

 
Pese a la última querella presentada por el Consejo de Defensa del Estado (CDE) por cuasi delito de homicidio, el Ministerio Público insistirá en que la menor fue víctima de torturas y mantendrá los delitos de apremios ilegítimos y tormentos con resultado de muerte.

La fiscal Érika Vargas confirmó a El Diario de Cooperativa que esta reformalización "tiene que ver con un mejor encuadre y detalle de los hechos por los cuales el Ministerio Público formalizó con los distintos antecedentes que hemos podido recoger en la investigación".

"La Fiscalía toma sus decisiones en relación a los antecedentes que mantiene en la carpeta de investigación y, hasta el momento, los antecedentes que mantiene respecto de estos 10 formalizados es que estamos frente a figuras de apremios ilegítimos, no ha variado esa calificación jurídica", añadió la persecutora.

En tanto, la abogada de Galaz y Valdés, Jacqueline Stubing, afirmó que "la Fiscalía ya no está luchando con nosotros que somos las defensas, sino que lucha con aquellos que tiene sentados a su lado".

La defensora apuntó que "todos ellos tienen una estrategia distinta, el que representa a la madre va por un homicidio, el Consejo de Defensa del Estado por un cuasi delito, la Fiscalía va por apremios ilegítimos, entonces, en realidad, la Fiscalía tiene una doble labor".