Con cautela reaccionó el actual Gobierno al nombramiento de los futuros ministros de Sebastián Piñera, quienes asumirán en el cargo el próximo 11 de marzo.

 

En el Ejecutivo miraron estas designaciones y los nombres que más llamaron la atención fueron los del futuro titular de Educación, Gerardo Varela, por su rechazo a la reforma educacional impulsada por la administración de Michelle Bachelet, y también el de Isabel Plá, quien asumirá en el ministerio de la Mujer y Equidad de Género.

 

Ella ha sido una fuerte opositora a la despenalización del aborto en tres causales, proyecto emblema de la actual administración. En junio del año pasado, la futura secretaria de Estado escribió en una columna que el aborto “es una de las mayores injusticias de la humanidad -como fue antes la esclavitud, considerada legítima durante siglos, y como sigue siendo, a mi juicio, la pena de muerte-“.

 

La ministra de Salud, Carmen Castillo, hizo un llamado a la responsabilidad con aquellas legislaciones que ya fueron aprobadas, además de asegurar que lo importante de la ley que despenaliza el aborto es la libertad que tienen las mujeres para decidir sobre su embarazo.

 

Respecto de este mismo nombramiento, la subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Fríes, dijo esperar que las mujeres defiendan, a partir del 11 de marzo, el legado que Michelle Bachelet dejó en temas valóricos. Comentó, incluso, que ella permanecerá en esa misión desde la sociedad civil.

 

Otra polémica percepción de la futura ministra Isabel Plá es la que dio a conocer en 2015 respecto del acoso a la mujer. Ella consideró, por entonces, que “a la mayoría de las mujeres nos gustan los piropos y no tenemos complejos con la femineidad”.

 

A propósito, fue consultada también la actual titular de la cartera, Claudia Pascual, pero desestimó entregar una opinión respecto del nombramiento de su sucesora.

 

La vocera de Gobierno, Paula Narváez, dijo que espera del futuro gabinete un trabajo constructivo.

 

Cada ministro coordinará, a partir de ahora, un encuentro con los futuros secretarios de Estado para comenzar con el denominado “traspaso” de mando, con los resúmenes de la actual administración, proyectos en desarrollo y lineamientos.