Gran polémica desató un reportaje que dejó al descubierto el jugoso y cuestionado contrato que tenía Marcela Cubillos, (exUDI, hoy más cercana a Republicanos) candidata a alcaldesa por Las Condes, con la Universidad San Sebastián, (USS) plantel ligado a figuras del mismo sector político de la derecha y fundamentalmente de la UDI. "Con su sueldo, la universidad le financia su campaña" señalan funcionarios de esa casa de estudios intimamente ligada a la derecha.
La USS resultó salpicada por el escándalo de los chats de Luis Hermosilla, debido a que allí encontraron trabajo varios de los involucrados en el caso, partiendo por Andrés Chadwick, nada menos que presidente de directorio de la casa de estudios. Y antes de ser presidente del directorio, Chadwick fue Decano de la Facultad de Derecho de esa universidad.
También pasaron por allí la suspendida ministra de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, el ministro Jean Pierre Matus, el exfiscal Manuel Guerra, el exministro Felipe Ward (que renunció hace unos días) y el actual diputado RN Diego Schalper, entre otros.
Desde la universidad afirman que estos personajes tenían trabajos de docentes con «contratos suculentos», pero que prácticamente no daban clases ni realizaban actividades concretas. «Había hartas situaciones irregulares», señalan.
El diario digital El Mostrador donde aparece el reportaje, tildó a esta universidad como una “caja pagadora” y publicó detalles de los contratos. Entre ellos, el de Marcela Cubillos quien, si bien no ha salido mencionada en el caso Hermosilla, llamó la atención por las características de su trabajo, el que dejó antes de oficializar su candidatura.
Según fuentes del citado medio, la actual candidata de derecha y exministra de Educación y Medio Ambiente de Sebastián Piñera, recibía $17 millones de pesos mensuales como docente. El jugoso monto se le pagó incluso mientras estaba viviendo en España, junto a su esposo, el exministro Andrés Allamand, quien logró un importante cargo en ese país.
La misma fuente, que sería un administrativo de la USS, en los pasillos universitarios se comentaba que Cubillos “practicamente nunca dio clases” ni tampoco hizo investigación como señala la candidata a alcaldesa en su respuesta. Además que nunca tuvo permiso para trabajar desde España, donde vivió un par de años.
Un funcionario de la universidad señala que este plantel universitario "le financió y financia la campaña" a Cubillos y es denominada una especie de "sala de espera" entre campaña y campaña eleccionaria de los "docentes" de la derecha.
El diputado Nelson Venegas dijo que “Hermosilla ha calado profundamente en el deterioro de las instituciones de la República, incluso más allá del Poder Judicial” e hizo ver que “si hay un lugar donde precisamente parte importante de esta situación se está dando es en la Universidad San Sebastián”.
En ese marco, legisladores están pidiendo que el Ministerio de Educación haga una auditoría sobre el funcionamiento del plantel universitario y el propio diputado Venegas enfatizó que “así como todos los caminos conducen a Chadwick (en el Caso Hermosilla), también parece que todos los caminos conducen a la Universidad San Sebastián”.
La respuesta de Marcela Cubillos
Ante el escándalo, Cubillos salió a defenderse y lo hizo con una publicación en su cuenta de X. No desmintió el monto, confirmó que era “un muy buen trabajo” y enrostró sus labores.
“Sí, dejé un muy buen trabajo para asumir la candidatura en Las Condes. El año 2020 empecé a trabajar en la USS hasta agosto de este año. En docencia e investigación”, partió reconociendo.
Sobre los pagos, pese a estar fuera, se limitó a señalar: “Mi marido ejerce un cargo en España, sí. Yo trabajo en Chile”.
Para cerrar, destacó sus logros: “Estuve siempre entre los profesores mejor evaluados por los estudiantes de la Facultad y publiqué, durante estos años, 3 libros y un cuarto en colaboración con otros académicos”.