El actual diputado de Concepción y candidato a senador por la zona José Miguel Ortiz, conversó con Cambio21 respecto a los desafíos regionales y otros temas de contingencia política-electoral mientras retoma las tareas legislativas de manera presencial, después de haber sufrido incluso el Covid19, “fue algo estremecedor” recuerda.

 

En esta elección Ortiz busca dar el salto al Senado en representación del BioBío lo cual implica un enorme desafío de trabajo con las nuevas provincias que busca representar y en la próxima legislatura.

Para el legislador la clave de una buena política es " siempre escuchar a la ciudadanía" y advierte "en eso nunca hay que perderse, quienes legislamos llevamos el mandato y somos la voz de nuestros territorios y sus habitantes y esa es la voz que la gente quiere ver expresada la de las soluciones".

Esta es la primera vez que postula al Senado después de una larga trayectoria en la Cámara de Diputados y señala que " estoy tremendamente comprometido con mi región, mi casa de toda la vida y creo que puedo ser un aporte para el desarrollo del Biobío en el Senado".

 

Existen múltiples desafíos en materia de desarrollo para la región, por ejemplo, en el gran Concepción debemos avanzar en integración urbana, para ello hay que impulsar iniciativas público-privadas que permitan generar proyectos de integración social y territorial; tenemos que volver a fomentar y valorar la vida de barrio, la integración entre vecinos que hemos perdido.

Otro de los aspectos que urge priorizar tiene que ver con la conectividad. Hoy tenemos un desequilibrio en el sistema de transporte entre oferta y demanda que se traduce en congestión. Por tanto, debemos avanzar en nuevas alternativas de conectividad que sean seguras, asequibles y sostenibles y lo más importante que mejoren la calidad de vida de las personas.

También urge poner en la agenda el derecho a un medio ambiente sano, por ejemplo:

Los derechos de agua hoy están en manos de privados y entiendo que será materia de la Convención revisar el derecho que la propiedad tiene sobre los bienes comunes, como el agua.

Sin embargo, hay situaciones dramáticas que corregir, le pongo un ejemplo: desde hace 15 años en las provincias de Bio Bio, Arauco y las comunas rurales de la provincia de Concepción se contratan camiones aljibe para surtir de agua potable a más de 35 mil personas en la región. Es hora de empezar a dar soluciones definitivas, cuando se tiene un problema de 15 años, es un asunto estructural, no una emergencia.

 

Hay que dinamizar nuestra economía regional entendiendo qué cada sub-territorio presenta distintas vocaciones económicas y productivas, por tanto, trabajare para fomentar la mayor inversión pública y privada que cumpla altos estándares medioambientales.

 

Desde la perspectiva provincial, hay que elaborar iniciativas que mejoren nuestra conectividad, como la habilitación del paso Pichachén. Hay otras iniciativas como un plan maestro para consolidar a los Saltos del Laja como un polo turístico de la región.

Debemos avanzar y formalizar el reglamento de la Ley de Rezago e implementarla de recursos especiales para levantar proyectos en la zona cordillerana y el secano interior, conservar la riqueza patrimonial de San Rosendo y ponerla en valor junto con las viñas que están produciendo vinos de tan buena calidad.

Otro de los múltiples desafíos está en Los Ángeles, donde hay que generar e impulsar una política de shock de inversión pública en la comuna ya que es prestadora de servicios de un área metropolitana que existe en el entorno, que no está reconocida como tal, pero es un lugar de arribo, de comercio, incluso del norte de La Araucanía.

 

Lo dijimos hace un par de semanas, el escenario futuro es preocupante se proyecta un aumento de la inflación importante y una desaceleración de la producción lo que se traduce en un bajo crecimiento que el propio Banco Central proyecta que no iría más allá del 2% al 2023.

Claramente, los próximos años constituyen un tremendo desafío en materia económica y el próximo gobierno –que espero encabece Yasna Provoste- tendrá la misión de recuperar la capacidad de crecimiento, contener las presiones inflacionarias que señala el BC y también impulsar un tipo de recuperación que apunte a generar empleos y mejorar la capacidad de crecimiento del país. No podemos seguir en la mediocridad de la baja productividad y creo que como centroizquierda debemos liderar ese proceso.

 

Hay que comenzar a pensar en impulsar una política de recuperación de los niveles de desarrollo del país con énfasis en inversión en innovación, ciencias y tecnología. No puede ser que sigamos invirtiendo sólo 0,34 del PIB en innovación y ciencias, por eso, con Yasna Provoste hablamos de llegar al 1% del PIB de inversión en CIT al año 2025.

De ahí que es clave impulsar políticas pro emprendimiento y pro desarrollo de nuevas industrias con foco en la innovación productiva; para dar más valor agregado a lo que producimos y exportamos, se necesitan más y mejores bienes públicos para la competitividad.

Debemos generar alianzas estratégicas con gremios Pymes como Asech, Conapyme que quieren un nuevo tipo de desarrollo para la región y el país.

 

No son buenas noticias las del mercado laboral, vemos en el último informe entregado por el INE, que de los 107 mil nuevos empleos 104 mil corresponden a empleos informales, una cifra alarmante.

La tasa de informalidad laboral crece en 12 meses un 4,5% y se acerca a un 30% de nuestro mercado laboral y esas no son buenas noticias, ya que la informalidad significa empleos sin contrato y sin protección social.

En lo que viene el desafío no es sólo disminuir la informalidad, también hay que apuntar  a una mayor inserción laboral femenina apoyando la recuperación de sectores económicos intensivos en generación de empleos como el turismo y la cultura por nombrar algunos.

Recuperar empleos es urgente y ello supone re-diseñar los actuales subsidios y mejorar la ejecución de la inversión pública regional como desafíos urgentes.

 

Es clave que presupuesto 2022 mantenga impulso fiscal, pero ahora con prioridad en la inversión pública y en el gasto de capital, no en las transferencias. Es otro error del gobierno actual proponer que se recorte en 20% el presupuesto 2022.

Vamos a necesitar contar con políticas públicas activas para recuperar el crecimiento; en especial aquellas enfocadas en impulsar la inversión pública, especialmente en regiones.

Lo que ha ocurrido es alarmante, por ejemplo, vemos que al mes de julio el gasto de capital y los subsidios al empleo que se reforzaron en presupuesto 2021 mediante el Fondo de Emergencia Transitorio Covid19 alcanzan apenas una ejecución del 20% según el último reporte de Hacienda.

Además, a esos recursos debemos sumar la lenta ejecución de la inversión regional que al mes de julio que solo alcanza al 40%, siendo la de peor ejecución de la última década.

Para esta discusión presupuestaria debemos re-orientar el gasto fiscal hacia la inversión pública, hacia el apoyo a sectores productivos que deben reactivarse, apoyar la generación de nuevos empleos de calidad entre otras tareas.

 

El problema del sistema de pensiones es que el modelo de AFP’s de capitalización individual genera cada día peores pensiones, especialmente para las mujeres. El promedio de las pensiones es cerca de $240.000 mensuales, lo que es un fracaso y en el caso de las mujeres el 50% de ellas reciben pensiones inferiores a $160.000 de las AFP’s..

Este gobierno nunca quiso transitar hacia un modelo de seguridad social con solidaridad intra e intergeneracional, con un 6% de mayor cotización destinada a crear un Fondo de Ahorro Colectivo que mejore las nuevas pensiones.

Ahora, a pocos meses de terminar el periodo, como fracasó su propio proyecto pro AFP’s, y no avanzó en el Congreso saca una ley corta, pero esa ley corta no toca el modelo de las AFP’s, no termina con el fracasado modelo.

Una ley corta para mejorar el Pilar Solidario, subiendo PBS y ampliando cobertura del Pilar Solidario NO va a arreglar el problema estructural de tener un sistema con bajas pensiones, por eso, el próximo gobierno –que espero encabece Yasna Provoste- debe tener como tarea principal hacer esa Reforma estructural para que tengamos un verdadero sistema de seguridad social sin AFP's y espero que en los primeros 90 días del próximo gobierno se envié esa reforma al sistema de pensiones y pasemos hacia la solidaridad en el sistema previsional y dejemos atrás a las AFP’s.