La nueva presidenta de la falange dijo lamentar el impasse con los socialistas en la fallida inscripción de primarias, pero reafirmó su apuesta por la unidad para derrotar a la derecha en las próximas elecciones.
"No vamos a desangrarnos en este momento en temas que no son importantes para la gente ni en disputas, yo estoy por encima de eso", afirmó.
Después de que la fallida inscripción de primarias de la Unidad Constituyente fracturara las históricas relaciones entre el Partido Socialista y la Democracia Cristiana, la nueva presidenta de la falange, Carmen Frei, declaró que una de sus misiones es "limar asperezas" con esa tienda, y con las demás de la ex Concertación.
"El bien de mi país y de su gente va más allá de poner o no la otra mejilla. Hemos trabajado durante muchos años, reconquistamos la democracia con heridas mucho más profundas que las que podamos tener ahora con el Partido Socialista y los demás partidos de Unidad Constituyente y la oposición, y en eso voy a trabajar", anticipó en Cooperativa.
En resumen, con la colectividad que dirige Álvaro Elizalde "vamos a limar asperezas, vamos a conversar francamente y no nos vamos a mandar recados por los diarios, sino que en persona y cara a cara trataremos de todos reconocer los errores, pero al mismo tiempo mirar para adelante".
"A la gente no le interesa que estemos enfrascados en disputas: 'que dije, que no dije, que llamé, que no llamé'. Yo no voy a caer en eso, estoy por encima de eso", sentenció.