Los problemas en Revolución Democrática (RD) y La Moneda siguen escalando después de destaparse el caso Democracia Viva y la modalidad en que funcionan diversas fundaciones que reciben dinero de parte del Estado.
La delegada presidencial de la Región del Biobío, Daniela Dresdner, es otra de las figuras políticas del oficialismo que está siendo duramente cuestionada al conocerse su vínculo con Urbanismo Social y su amistad con la diputada Catalina Pérez y su ex pareja Daniel Andrade.
Todos son militantes de RD y están sujetos a diversas presiones por los millonarios acuerdos que estas ONG han llegado con el Serviu y el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) a través de las Secretarías Regionales Ministeriales (Seremi).
En Concepción y las otras comunas donde Dresdner es la principal autoridad gubernamental exigen su renuncia por un trato directo entre Urbanismo Social y el Serviu (por $148 millones) y por una boleta de $3.900.000 que en 2021 presentó Andrade, representante legal de Democracia Viva, por una “Asesoría en Comunicación Estratégica Campaña Daniela Dresdner por pagar” en el marco de su postulación al Senado que no prosperó.
“Nosotros estamos disponibles a poner todos los antecedentes sobre la mesa respecto a lo que hay. También hay que decir que la situación de Antofagasta es bastante distinta de la situación del Biobío. Acá no existe ningún indicio de ningún tipo de delito, ni tampoco de ningún comportamiento antiético”, complementó Dresdner.
Si bien el gobernador del Biobío, Rodrigo Díaz, ha manifestado que este vínculo no favorece a Democracia Viva y su salida es injustificada, hay otras voces penquistas y de esta zona del país que exigen la salida de la delegada presidencial.
“Espero que renuncie. Cuando tú tienes a la máxima autoridad regional, cuestionada hoy por sus vínculos con los responsables de posibles convenios truchos, lo que corresponde es salir del cargo. Primero, porque existe una responsabilidad política que debe ser asumida y segundo, porque aquí existe una investigación penal en curso que daña profundamente la fe pública”, afirma el senador Sebastián Keitel (Evópoli).
“Creo que el vínculo de Daniel Andrade entregando una boleta por 3.900.000 pesos en la campaña senatorial de la actual delegada regional del Biobío es un hecho que agrega complejidad a la situación de la propia delegada. Yo creo que es el momento en que el Gobierno, el Ministerio del Interior, evalúe si es bueno para el propio Gobierno mantener esta situación”, agregó Eric Aedo de la DC.
Felix González del Partido Ecologista Verde, Joanna Pérez de Demócratas y Karen Medina del Partido de la Gente también exigen que Daniela Dresdner deje su cargo.