La campaña electoral ya está desatada, y no es para menos, sabiendo que cada vez falta menos para elección presidencial, es por ello, que los candidatos están dando el todo por el todo y así obtener buenos resultados en las urnas.

 

Si bien aún no comienza oficialmente la campaña, los debates han sido un buen instrumento para ellos, en los que no solo se han encarado unos contra otros, sino también para exponer sus ideas.

 

Aunque, hay alguien que ha tomado otro camino, el camino de la abstinencia a estos formatos y ha preferido guardar silencio. El candidato de Chile Vamos, Sebastián Piñera, hasta ahora ha asistido solo a uno de los debates en los que se han enfrentado los otros siete contrincantes.

 

 

No obstante, el candidato presidencial aceptó las invitaciones a participar en un debate de la Asociación Nacional de Prensa (ANP) y la Asociación de Radiodifusores de Chile (ARCHI) y la Asociación Nacional de Televisión (Anatel).

Aunque, desde el comando del candidato se había pedido restringir la participación de los ocho aspirantes a La Moneda y que Piñera solamente tuviera que debatir con Alejandro Guillier y Beatriz Sánchez en el foro presidencial organizado por la Archi.

 

En esa ocasión, Piñera sostuvo que "lo que nosotros creemos importante es que el debate, sea un debate de ideas, de propuestas, de futuro, de soluciones y no como algunos debates que parecen más un ring de box, donde parece de quién descalifica más y quién insulta más.

 

Eso no le hace bien a la política ni al país". Esta opción fue duramente criticada por los otros postulantes, ME-O lo calificó de "cobarde" y la abanderada del Frente Amplio señaló que esto era "antidemocrático".

 

 

Para algunos no es una buena posición, aunque desde la vereda del frente lo ven positivo este veto de silencio que ha adquirido.

 

Pero, ¿será positivo enfrentarse así a una elección? En algunos países existe sólo asistencia a un debate, y en cambio en otros no existe este formato.

 

Según Patricio Tombolini, vicepresidente del Partido Radical, “un debate sirve para contrastar posturas”.

 

“Lo segundo es que varios de los candidatos, de una forma u otra, vienen de una raíz ideológicamente parecida que los une y que evidentemente los diferencia de la derecha, además que es sabido que Piñera ha estado rehuyendo la discusión porque en este período de campaña le ha prometido a los chilenos un país más conservador y menos inclusivo. Y eso se lo van a mostrar”, comentó a Cambio21.

 

“Desde la vuelta a la democracia que se viene debatiendo sobre los dos modelos de desarrollo de país: uno más inclusivo y con más oportunidades y menos conservador y otro que intenta mantener todos los privilegios que unos pocos han tenido desde siempre, el cual defienden Piñera y Kast”, agregó.

 

 

 

Desde el otro ángulo, Patricio Gajardo tiene una visión más positiva con esta ausencia. El cientista político dijo a Cambio21 que “desde la parte comunicacional, creo que es la estrategia correcta, es lo que tiene que hacer, por una razón muy simple: él va primero en las encuestas”, agregando que “todos los candidatos que van primero en las encuestas van a tender a ir lo menos posible a los debates y entrevistas”.

 

A ello, el profesional agregó que “eso ha marcado un poco la tendencia con Gonzalo Cordero en comunicaciones, veíamos un Piñera mucho más activo que daba entrevistas de todo tipo, y ahora vemos uno más alejado de los medios, se refiere más a Bachelet que a los otros candidatos”.

 

“Dado ese escenario, creo que está haciendo lo que todo candidato con primera posición debe hacer, Michelle Bachelet cuando iba en primer lugar en el 2013 actuó de manera muy similar, él no tendría por qué darle espacio a candidatos “chicos”, porque así no cae en errores”, planteó Gajardo.

 

Por último recalcó que “aquí tampoco se está diciendo que no vaya a ningún debate o ningún programa, o sea tiene que estar, pero solo asistir a lo indispensable. En Alemania tuvieron un debate, entonces los que van por delante tienen que hacerlo, no darle espacio a los contrincantes”.