Una reunión bilateral sostuvo el presidente Sebastián Piñera con la Canciller federal de Alemania, Angela Merkel, la actividad más esperada por la prensa en su visita a ese país.
Se espera que la visita sirva para sondear el apoyo de Alemania de cara a la modernización del acuerdo entre la Unión Europea y Chile, contando ya a la fecha con el respaldo de Francia y España para sacar adelante la causa.
El mandatario realizó una declaración conjunta tras su reunión con la canciller alemana Angela Merkel con quien estuvo reunido cerca de una hora en el marco de su gira por Europa.
Piñera aseguró en la ocasión que hay disposición para conversar con Bolivia, pero que antes de pensar en "nuevos diálogos", se tienen que cumplir "algunas condiciones básicas", entre ellas "que Bolivia abandone su absurda pretensión sobre territorio, mar o soberanía chilena", aseguró.
Además, el mandatario aseguró que es necesario que "se respete íntegramente y de buena fe el tratado de límites entre Chile y Bolivia de 1904" y que "se respete el fallo de la Corte Internacional de Justicia".
Piñera además destacó que la carta aún no ha sido recibida y que "leeremos con ateción".
Más tarde, el Mandatario se juntará con el Presidente Federal, Frank-Walter Steinmeyer, en el Palacio Presidencial Bellevue, actividad después de la cual se reunirá con el presidente del Parlamento Alemán, Dr. Wolfgang Schäuble, en la sede del Congreso de ese país.
La agenda de Piñera terminará este miércoles con una visita al memorial y Centro de Documentación del Muro de Berlín. En tanto, el jueves se dirigiría a la ciudad de Hamburgo para continuar con la visita a Alemania.
Firma con frase nazi
Esta es la segunda vez que Sebastián Piñera llega como presidente de Chile a Alemania. Sin embargo, la vez anterior se caracterizó por un bochorno de proporciones.
En la ocasión, el respetado periódico alemán Süddeusche Zeitung reveló que durante su desayuno junto al presidente alemán Christian Wulff, Piñera fue invitado a firmar el libro de visitantes. Y el mandatario chileno escogió una conocida frase del antiguo himno alemán considerada nazi y que ha sido omitida del actual himno oficial.
La frase de la discordia es "Deutschland über alles" ("Alemania sobre todo"), que según narra el rotativo, le fue deletreada por el embajador chileno Jorge O'Ryan Schütz ante el asombro y la vergüenza del presidente alemán.
"No tenía ninguna conciencia de que esa frase pudiera estar ligada a un pasado oscuro de ese país y por tanto lo lamento y pido las disculpas del caso", declaró el mandatario a su regreso a Chile.