Por Mario López M.
Al terminar la gira por Europa del Presidente Piñera, solo quedan las palabras grandilocuentes, unas cuantas piñericosas, un inmenso gasto fiscal con cerca de 25 invitados y el glamoroso traje de la primera dama al mejor estilo español, frente al Papa.
Pese a ello, Piñera asegura que "Hemos logrado muy buenos acuerdos y compromisos, que van a permitir a Chile robustecer su capacidad de crecer", dijo el Mandatario, sin señalar a cuáles se refiere.
Mientras tanto en Chile suben los combustibles a precios inéditos, bordeando los $900 por litro de bencina y los pasajes del Transantiago se disparan en otros $200, mientras los índices muestran que los salarios disminuyeron ostensiblemente.
Pero Piñera insiste en grandes inversiones que no han llegado ni se vislumbra que lo hagan. Ahora sostuvo que se han logrado "muy buenos acuerdos y compromisos con el presidente (Pedro) Sánchez de España, con el presidente (Emmanuel) Macron de Francia, con la canciller Angela Merkel de Alemania". En campaña, afirmaba que apenas asumiera se mejorarían los salarios y la cailidad de los empleos, al paso de que aumentarían las inversiones.
Nada de eso ha sucedido.
Con la verborrea y locuacidad a que nois tiene acostumbrado, afirmó que estos "son acuerdos y compromisos que van a permitir a Chile robustecer su capacidad de crecer, de generar empleos, de generar oportunidades. Por eso estamos contentos con esta gira, porque ha sido una gira muy intensa, pero tenemos la satisfacción de que también ha sido una gira muy fecunda".
“El objetivo de esta gira fue lograr acuerdos que sean buenos y beneficiosos para todos los chilenos, para tener más inversiones, más crecimiento, más empleo, más oportunidades. Nos vamos contentos (…) Volvemos a Chile con el alma inspirada por el Papa”, dijo pletórico.
Hace seis meses dijo lo mismo y lo repitió nuevamente ante el Congreso Pleno... ¿Usted ve los resultados?
Hoy recién la derecha en el gobierno está tomando en serio las consecuencias por los efectos de la guerra comercial entre China y Estados Unidos, los que ninguneó nuestro ministro de Hacienda, quien aseguraba que a Chile y a su economía no le tocaría porque las inversiones llegarían a nuestro país por el solo hecho de asumir Piñera.
Habrá que seguir esperando los tiempos mejores...
