El senador socialista José Miguel Insulza se refirió a la continuidad del proceso constituyente que llevan adelante los partidos políticos con representación parlamentaria y señaló que “para que nadie se quede atrás y los chilenos se sientan representados, tenemos que hacer concesiones”.
El parlamentario comentó la forma en la que según él se debería ir pavimentando el camino para tener una nueva Constitución en Chile.
En esa línea, Insulza recalcó la necesidad de no repetir los errores cometidos por la Convención Constitucional y se mostró a favor de que un órgano electo elabore un texto de forma breve, con participación de expertos “para asesorar a los que votan” y “con bordes más claros”.
Respecto a las conversaciones entre los partidos políticos, el senador Insulza expuso: “Si me pongo a poner bordes ahora la negociación no termina nunca. Puedo decir cosas generales y no exigencias. Mientras menos digamos del acuerdo al público, más posibilidades va a haber de sacar el acuerdo. Y no es cocina”.
“Quiero una nueva Constitución y creo que lo que salga de las conversaciones, y de la institución que se cree a partir de eso, porque ni siquiera le hemos puesto nombre, lo que salga de ahí será lo que sea la Constitución y debe ser sometida a plebiscito de salida vinculante con votación obligatoria. Y tomando todas las medidas antes para evitar un nuevo fiasco”, agregó.
En ese sentido, el exsecretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) expresó que no cree que una nueva Carta Magna llegué a estar lista antes del 11 de septiembre del 2023, cuando se cumplen 50 años del Golpe de Estado.
“Yo dije en una reunión del Partido Socialista que termináramos el acuerdo antes del 18 de este mes para terminar la Constitución antes del 11 de septiembre de 2023, pero si no se puede hacer la elección de convencionales antes de abril, como lo dijo el presidente del Servel, entonces difícilmente una Convención de seis meses va a hacer la gracia, si queremos una buena Convención”, indicó.
Además, el senador socialista también aprovechó de opinar sobre el rol que podría tener los expresidentes de la República en la discusión del proceso constituyente 2.0 y señaló que “si alguien quiere que estén los cuatro expresidentes yo no sería un obstáculo para eso, pero no me imagino a los cuatro expresidentes sentados en una mesa escribiendo una Constitución mientras el país espera”.
“Eso ni siquiera ha sido mencionado en las reuniones. Más bien se ha mencionado que deberíamos tener una conversación o algo de ese tipo”, complementó.
Finalmente, José Miguel Insulza se refirió al proyecto de la difunta Convención Constitucional opinando que “el proyecto de la Convención era bastante bueno, tal vez con demasiados verbos y adjetivos, en la parte de los derechos”.
“Los derechos estaban claros y eso es bueno. Pero una constitución que no tiene clara una forma de gobierno no es una constitución”, cerró el parlamentario en El Mercurio.