El próximo martes se realizará en Brasilia la cumbre regional sudamericana impulsada por el presidente de Brasil, Lula da Silva.
A la instancia asistirá Gabriel Boric, quien viajará a la ciudad este lunes 29 de mayo, concretando un encuentro con los demás países invitados como Argentina, Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
La cumbre tiene como "objetivo principal retomar el diálogo" entre los países de la región, "que no se reúnen hace muchos años", según explicó la secretaria para América Latina y Caribe de la Cancillería brasileña, Gisela Padovan.
Brasil desea que este diálogo sirva para discutir la posibilidad de "volver a contar con un mecanismo de integración puramente suramericano", que sea "permanente, inclusivo y moderno" e incluya a los doce países de la región, independientemente del color de su Gobierno.
Según se informó, Perú será el único país de Suramérica que no estará representado a nivel presidencial, ya que Dina Boluarte, quien no puede salir del país sin autorización parlamentaria, será reemplazada por el presidente del Consejo de Ministros.
La cumbre se desarrollará en un único día, con dos sesiones, una por la mañana en el que todos los presidentes harán un pronunciamiento inicial, y otra por la tarde, que consistirá en un diálogo "informal" entre los gobernantes.
Este formato, sin agenda estructurada, pretende fomentar que los presidentes hagan un intercambio de ideas con total libertad, para identificar los "denominadores comunes" que sirvan de base para retomar el proceso de integración.
Además, los presidentes pretenden abordar la posibilidad de poner en marcha proyectos de cooperación conjuntos, algunos de los cuales se podrían hacer "de forma inmediata".