La medida disciplinaria de llamado al orden y el pago del 1% de su dieta mensual, fue sancionado este martes al diputado Gabriel Boric (CS), luego que la Comisión de Ética de la Cámara lo encontrara culpable de haber burlado las medidas de seguridad del Congreso para facilitar el ingreso de personas a la sede legislativa.
El hecho ocurrió el 18 de diciembre pasado cuando se desarrollaba la discusión de la reforma constitucional de paridad de género en caso de que del plebiscito salga ganadora la opción de Asamblea Constituyente.
En la oportunidad, el parlamentario frenteamplista facilitó su propia huella digital en los torniquetes de seguridad instalados para controlar el paso de los invitados a la Corporación, para que pudiera ingresar un grupo de personas que protestó al interior del edificio.
Según la resolución de la instancia disciplinaria, Boric vulneró los protocolos de ingreso, además del sistema de control relativo al uso de credenciales de identificación, esenciales para garantizar la seguridad de todos quienes circulen por la sede del Poder Legislativo.
Añade que su conducta atenta contra el debido respeto al personal de la Corporación, en particular a los funcionarios encargados de supervisar el cumplimiento de la normativa sobre acceso de personas al edificio y a las tribunas, quienes se vieron imposibilitados de hacer su labor respecto de las mujeres que el diputado hizo ingresar de forma irregular.
Al respecto, el diputado Andrés Celis (RN), autor del requerimiento para juzgar el proceder de su par de Convergencia Social, aseguró que éste “no sólo ignoró y faltó el respeto al personal que trabaja en supervisar el acceso de las personas al edificio, sino que también a sus compañeros y a todos quienes transitan por el Congreso, pues hizo oídos sordos a protocolos que se cumplen para resguardar la seguridad de todos quienes circulan por el parlamento”.
“Con sus acciones, Boric promueve un actuar contrario a las normas e incluso fue prepotente, pues da cuenta de que se puede hacer libremente lo que se le da la gana, sin analizar las consecuencias ni respetar la organización ni las disposiciones vigentes”, subrayó.
También, el legislador oficialista agregó que el comportamiento del parlamentario por Magallanes “demuestra su actitud irrespetuosa e irracional, que está muy lejos de las directrices que deben guiar las acciones de todo parlamentario”, finalizó.