El fiscal regional Metropolitano Oriente, Manuel Guerra, anunció que se dará inicio a una investigación penal sobre el caso que involucra al subsecretario de Desarrollo Regional Felipe Salaberry (UDI). Esto, luego de que algunos de los antecedentes revelados por radio Bíobío dan cuenta de actuaciones de funcionarios públicos que podrían enmarcarse en el tipo penal de tráfico de influencias.
“Tras analizar los antecedentes hemos decidido abrir una investigacion penal, y se ha designado al fiscal Felipe Sepulveda, jefe de Alta Complejidad, para indagar los hechos”, sostuvo el fiscal Guerra.
La información dada a conocer hoy por la emisora sostiene que el pasado 25 de agosto en la comuna de Ñuñoa la autoridad habría incurrido en faltas a la Ley de Tránsito al cruzar con su auto en tres esquinas con luz roja y desconocer un parte policial que habría emitido en su contra un funcionario del departamento de Seguridad de esa comuna que le cursó una infracción por su conducta temeraria. Acto seguido, según el mismo reportaje, Salaberry le habría solicitado a su hermana Iris -quien trabaja en el Municipio de Ñuñoa- que interviniera a su favor para evitar la infracción.
Este jueves, abogados de la Fiscalía Oriente recopilaron información solicitada por el fiscal Guerra respecto al caso. Esto, ya que pese a que todos los antecedentes han sido fuertemente desmentidos por el titular de la Subdere, algunas de las actuaciones reveladas por el artículo -a ojos del Ministerio Público- podrían configurar el delito de tráfico de influencias.
En particular, la situación respecto de la cual el Ministerio Público puso la lupa es respecto a la actuación que -según el reportaje de Biobío- tuvo la hermana del subdere. Iris Salaberry, según el reportaje, a las 17:09 del día en que se le cursó la infracción habría solicitado información sobre el fiscalizador, pidiendo su identidad y sosteniendo que necesitaba ubicarlo, pues el guardia de seguridad municipal habría seguido durante varias cuadras a su hermano intentando chocarlo.