Tras la aprobación del tercer retiro del 10% en la Comisión de Constitución del Senado -y ante su inminente votación en sala el próximo jueves 22 de abril- el presidente Piñera presentó ante el Tribunal Constitucional un requerimiento para evitar un nuevo giro desde los fondos de AFP.

La determinación fue anunciada desde el Palacio de La Moneda por el ministro de la Segpres, Juan José Ossa. Él es el encargado de las relaciones entre el Ejecutivo y el Congreso.

Este escenario había sido adelantado por el Ejecutivo a través de sus ministros y por el propio Presidente Sebastián Piñera, durante el último mes.

“Lo digo fuerte y claramente, siempre vamos a defender el respeto a la Constitución porque es esencial en un estado de derecho y lo vamos a hacer en el proceso legislativo, recordemos que queda un trámite en el Senado, y de ser necesario en el Tribunal Constitucional”, sostuvo el viernes pasado el Mandatario.

“Es nuestro deber velar porque las reglas que actualmente nos rigen sean respetadas, por eso presentaremos un requerimiento al Tribunal Constitucional, en relación a este proyecto, que nos asiste la convicción atenta contra la calidad de vida de los chilenos, en esa etapa, que es la más importante de sus vidas, que es la vejez”, expresó el ministro secretario general de la Presidencia Juan Ossa.

Ante las consultas por una posible acusación constitucional en contra del presidente Sebastián Piñera, por acudir al TC para bloquear el tercer retiro, Ossa aseguró que se debe cuestionar por qué se siguen reformas inconstitucionales.

“Tenemos que preguntarnos por qué se están siguiendo reformas inconstitucionales y no preguntarnos por qué cumplimos como gobierno el deber de recurrir al TC”, comentó.

El proyecto de tercer retiro ya fue aprobado en primera instancia legislativa por la Cámara de Diputados, siendo ingresado este lunes a la Comisión de Constitución del Senado, y se esperaba que se votar el jueves en la Sala de la Cámara Alta.

En diciembre pasado, el Tribunal Constitucional declaró inconstitucional el proyecto de segundo retiro del 10% de los fondos previsionales, presentado por diputados, debido a que consideró que era potestad exclusiva del presidente de la República.

En dicha ocasión, hubo un empate de votos, donde cinco ministros manifestaron su intención de acoger, mientras que otros cinco estaban por rechazar.

Pero finalmente fue la presidenta del Tribunal Constitucional, María Luisa Brahm —quien fue empleada de Piñera y asesora del segundo piso de La Moneda en el primer gobierno de Sebastián Piñera— la que zanjó la disputa entre el Gobierno y el Congreso, manifestando su voto a favor del Ejecutivo.