La ministra vocera Cecilia Pérez se refirió al audio difundido el domingo pasado en que la Primera Dama, Cecilia Morel, dialoga con una amiga sobre el estado del país y las protestas sociales que se han extendido durante los últimos días.

“Amiga, yo creo que lo más importante es tratar de nosotros mantener la cabeza fría, no seguir calentándonos, porque lo que viene es muy, muy grave. Adelantaron el toque de queda porque se supo que la estrategia es romper toda la cadena de abastecimiento, de alimentos, incluso en algunas zonas el agua, las farmacias, intentaron quemar un hospital e intentaron tomarse el aeropuerto, o sea, estamos absolutamente sobrepasados, es como una invasión extranjera, alienígena, no sé cómo se dice, y no tenemos las herramientas para combatirlas. Por favor, mantengamos nosotros la calma, llamemos a la gente de buena voluntad, aprovechen de racionar las comidas y vamos a tener que disminuir nuestros privilegios y compartir con los demás”, se escucha en el audio de poco más de 50 segundos.

“Efectivamente ese audio es real. Es una conversación en el contexto de la primera dama con un grupo de amigas, donde el fin de semana, les manifiesta lo que creo todos los chilenos sentimos, que es la angustia, la frustración, la desesperación por lo que estábamos viendo y viviendo. Más de 13 estaciones de metro incendiadas simultáneamente, saqueos, incendios a supermercados (…)”, indicó la vocera.

La ministra Pérez agregó que “cuando la primera dama señala que estamos sobrepasados, no se refiere al gobierno, no se refiere a las FF.AA., se refiere a las imágenes impactantes que teníamos como país. Ese sobrepasarse del corazón, desde el alma, el no comprender cómo podía haber tanta violencia, cómo se podían aprovechar y que existiera delincuencia, saqueos con incendios que terminaron con la vida de personas. A eso se refiere la primera dama”.

Además, sobre la última parte del audio, donde Morel habla de “disminuir nuestros privilegios”, la vocera indicó: “Y qué duda cabe que cuando ella dice que hay que dejar ciertos privilegios, es justamente escuchar la voz de los chilenos como dijo el Presidente y reconducir estas legítimas demandas ciudadanas desde la responsabilidad a un lugar que nos lleve al reencuentro como chilenos, hermanos, hijos de la misma patria”.