La senadora independiente Fabiola Campillai dijo no creer en las disculpas públicas que tuvo que ofrecerle la diputada de la bancada de Renovación Nacional (RN), María Luisa Cordero, luego que asegurara que no estaba ciega.
“Han pasado ya diez meses desde sus injurias, ella nunca pidió disculpas. Ya el cansancio me hace recibir estas disculpas, pero no creo en ellas. Yo no le creo, pero las recibo y espero que sí sean sinceras, por el bien de todos nosotros y de mi familia”, expresó la senadora Campillai tras la audiencia de conciliación.
El tribunal ordenó a Cordero disculparse con la senadora Campillai, quien dio por cerrado el tema y dijo: “Ojalá que sus disculpas sean reales para no tener que pasar por este tema de nuevo”.
“Nosotros como diputados y senadores estamos para servir a la gente, para hacer proyectos de ley y aprobar esas leyes, para ayudar, no estamos para injuriar a nadie. Ella es una doctora y sabía el daño que podía causar en mí, en mi familia, y en mucha gente que también salió afectada con esto, porque hoy las personas ciegas somos cuestionadas por utilizar un teléfono”, añadió.
La diputada conocida como la doctora Cordero evitó hablar, pero al ser consultada sobre las palabras de Campillai, quien dijo no creerle, respondió: ¿Tú qué crees? ese es problema de ella”.
Qué dijo Cordero sobre Campillai
El 22 de marzo pasado, en radio El Conquistador, la diputada Cordero aseguró que la senadora Campillai, quien perdió sus sentidos del gusto, la vista y el olfato al recibir el impacto de una bomba lacrimógena por parte de Carabineros, no estaba completamente ciega.
“La señora Campillai, que se descubrió que ve… ¿Se acuerda que yo le dije que ella votó y le achuntó en el hoyo de la urna? Porque ella tiene un ojo bueno, ella no es totalmente ciega… tiene un ojo que le funciona (…) ella manda a quemar el país, manda a quemar los metros y que se yo”, aseguró.
Recordemos que la senadora Campillai recibió el impacto de una bomba lacrimógena mientras esperaba en un paradero de transporte público, en San Bernardo, por parte del expolicía capitán de carabineros Patricio Maturana, quien fue condenado a 12 años de cárcel.
El mismo día de los dichos, la sala del Senado, de manera transversal, condenó las palabras de Cordero y pidió a la mesa directiva de la Cámara de Diputadas y Diputados sancionar a la parlamentaria.
Campillai se mostró afectada y anunció acciones legales que, tras el desafuero, serían viables. "Yo voy a llegar donde tenga que llegar, porque no puede ser que en Chile aún exista el negacionismo", dijo la senadora en aquel momento.