El fútbol chileno ha perdido a uno de sus dirigentes históricos. A la edad de 86 años, fallece Alfredo Asfura y deja un legado inmenso en la actividad deportiva más importante del país.

Este empresario de ascendencia palestina registra 130 países, 38 giras de selección, 11 mundiales y más de 500 partidos organizados. Además, ocupó los cargos de gerente técnico, manager, director federativo, funcionario FIFA y asesor internacional de la ANFP, desde que comenzó su carrera en 1961 y que lo llevó a transformarse en un verdadero “hombre de fútbol”.

Asfura fue un negociador incansable y entre las historias que acompañaron su desempeño está la que asegura que fue capaz de conseguir un partido en Riad ante Arabia Saudita a cambio de un reloj y que logró cerrar una gira en Japón gracias a su pericia en la mesa con los palillos para comer arroz. También se cuenta que un día, en una gira a Egipto, logró meter a la delegación completa de la Selección en una lancha para perseguir a su propio barco, que acaba de zarpar, sobre las aguas del Nilo.

Su último trabajo para la Asociación Nacional de Fútbol profesional fue prestarle asesoría en el plano internacional, pero no le dolió salir cuando lo cesaron en diciembre de 2017. 

Nacido en octubre de 1937 en Chillán logró sobrevivir al gran terremoto que afectó a dicha ciudad en 1939 y ya en 1972 se hizo cargo de la Roja -como dirigente- y llevó a esa oncena al Mundial de Alemania 1974. Años después, emigra a Colo Colo, se encarga de fichar al mítico Severino Vasconcelos y logra la vuelta olímpica en 1979.

La confirmación de su deceso fue entregada por su querido Palestino, club que sube la noticia a sus redes sociales y lo califica “uno de los dirigentes chilenos más importantes de la historia”.