Los anarquistas Francisco Solar y Mónica Caballero, en las fotos, son los principales responsables de la colocación de la bomba que detonó el 25 de julio de 2019 en la 54° Comisaría de Huechuraba, así como también del artefacto explosivo que buscaba terminar con la vida del exministro del Interior del primer Gobierno de Sebastián Piñera, Rodrigo Hinzpeter, mientras este ejercía como gerente del grupo Quiñenco presidido por Andronico Luksic.

Esto último no ocurrió debido a un retraso en el almuerzo de la exautoridad, lo que permitió desactivar el detonante a tiempo. Pero el paquete tenía como destino su oficina y, según los antecedentes manejados por la Fiscalía Metropolitana Sur, tenía la capacidad de volar un piso completo del edificio. En el caso de la estación de la policía, un Carabinero resultó herido ya que fue quien abrió el envío.

Ambos son conocidos no solo por este evento sino también porque fueron los principales sospechosos de la causa relacionada al “Caso Bombas I” de 2011, en donde finalmente fueron absueltos. Asimismo, los dos fueron expulsados de España luego de ser condenados en 2013 por colocación de artefacto explosivo en la Basílica Nuestra Señora del Pilar en Zaragoza.

El fiscal regional Sur, Héctor Barros, junto al OS-9 de Carabineros y el fiscal Claudio Orellana determinaron en 2019 que Solar y Caballero estaban detrás de los atentados en Huechuraba y Quiñenco, por lo que un año después fueron detenidos y formalizados por el 11° Juzgado de Garantía de Santiago por los delitos de envío y colocación de artefactos explosivos, homicidio frustrado y daños calificados.

Debido a lo anterior, desde 2020 ambos se encuentran en prisión preventiva en la Cárcel de Alta de Seguridad (CAS) y en la Cárcel de Mujeres de San Miguel, respectivamente. Para Solar, los persecutores solicitarán más de 50 años, mientras que para Caballero serían más de 20 por cooperar con su expareja, informa La Tercera.

Venganza

En un hecho inédito, el anarquista decidió colaborar con la justicia prestando declaración y explicando las motivaciones detrás de los atentados. “Hinzpeter había sido ministro del Interior del primer Gobierno de Piñera, dejando una estela de represión que será difícil de dejar de recordar”, señaló.

“Reprimió duramente las movilizaciones sociales y estudiantiles, intentando levantar una ley marcada por prohibiciones de todo tipo, conocida como la Ley Hinzpeter. Como ministro del Interior fue responsable político del asesinato del joven Manuel Gutiérrez, reprimió duramente las movilizaciones sociales de Aysén y de Freirina, militarizó el territorio mapuche, lo que provocó cientos de heridos, muchos de ellos niños e innumerables presos”, argumentó.

Respecto de Carabineros, Solar aseguró que “mi idea fue atacarlos como institución, por lo que representan, por su historia de sangre, tortura y muerte. Decidí atacar la 54 comisaría de Huechuraba como un gesto de venganza por el asesinato de la compañera Claudia López en septiembre de 1998″.