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Ministerio de Medio Ambiente confirmó que no existe un plan ambiental para humedal urbano en Talca: Enfrenta graves amenazas al ecosistema y el año pasado inundó casas, estadio fiscal, universidades y campos

Foto: Estadio Fiscal de Talca, convertido en una piscina y los sectores aledaños, donde está el Humedal Urbano de esta ciudad capital del Maule

Redacción: Diario El Centro

La solicitud para reconocer al Humedal Cajón del Río Claro como “Humedal Urbano” ha estado en trámite desde 2021, pero hasta la fecha, el proceso continúa sin avances significativos. Este sector, ubicado en la comuna de Talca y extendiéndose de norte a sur en el sector poniente de la ciudad, presenta una rica biodiversidad y alberga múltiples espacios reconocidos por la comunidad local, como El Bajo, Los Areneros, La Isla, Canal El Cartón y el Parque Río Claro. En conjunto, estos sitios forman un sistema hídrico único que necesita urgentemente protección.

El Cajón del Río Claro posee un valor ecológico, cultural y social de gran relevancia. Este ecosistema proporciona diversos servicios ecosistémicos, incluyendo el control de inundaciones, la regulación del clima local y la filtración de aguas, entre otros. Sin embargo, actividades humanas como el depósito de escombros, caza ilegal, ocupación irregular de terrenos y la extracción no autorizada de áridos amenazan seriamente la integridad del humedal. Organizaciones locales han denunciado estas prácticas que erosionan continuamente este frágil ecosistema.

¿Hay avances en el proceso?
En enero de 2024, la Secretaría Regional Ministerial de Medio Ambiente de la región del Maule informó que el proceso de tramitación estaba en su fase final, a la espera de una revisión jurídica. No obstante, al acercarse el fin de año, mediante un oficio el Ministerio de Medio Ambiente indica que el trámite se encuentra aún en un análisis técnico, faltando la revisión legal y la resolución oficial para su reconocimiento como Humedal Urbano, es decir, el avance es nulo.

Este prolongado estancamiento genera preocupación en la comunidad, especialmente dado que se proyecta el inicio de las obras del casino Dreams Talca en enero de 2025, en el recinto ex Fital, una zona cercana al humedal y propensa a inundaciones.

Con la construcción de este nuevo proyecto en un área vulnerable, la urgencia de proteger al Cajón del Río Claro se torna más evidente, y la comunidad demanda una pronta respuesta de las autoridades para evitar el deterioro irreversible de uno de los últimos espacios verdes de Talca.

No hay un plan de gestión ambiental
Por si fuera poco, el Ministerio de Medio Ambiente confirmó que actualmente no existe un plan de gestión ambiental específico para el humedal urbano en Talca, pese a las amenazas que enfrenta este ecosistema. En el oficio, la entidad detalló que, aunque la Seremi de Medio Ambiente ha apoyado a la Municipalidad de Talca en la elaboración de una ordenanza local sobre humedales, aún no se han implementado medidas concretas de conservación. La ausencia de un programa de intervención deja al humedal vulnerable, mientras continúa el proceso de reconocimiento oficial, clave para proteger y conservar su biodiversidad.

La falta de avances en la declaración del Humedal Cajón del Río Claro como Humedal Urbano ha generado un profundo descontento en la comunidad de Talca, que ve en este espacio natural un recurso vital en riesgo.

El año pasado el río que cruza el humedal y varios canales adyacentes, se inundaron producto de las lluvias lo que provocó grandes sectores de la ciudad capital del Maule, Talca, absolutamente inundada. El estadio Fiscal, cerca de 100 casas, universidades, restaurantes, centros comerciales, barrios enteros y zonas agrícolas quedaron con más de dos metros de agua.

La preocupación se intensifica ante la proximidad de nuevas obras que podrían agravar la situación del humedal y comprometer su preservación. La comunidad y organizaciones medioambientales insisten en la urgente necesidad de protección oficial para este ecosistema, un paso crucial para asegurar su futuro y evitar daños irreversibles en uno de los últimos pulmones verdes de la ciudad.